El Gobierno estaría dispuesto a evaluar un plan de rescate por SanCor

La deuda de la empresa se estima en unos u$s 300 millones.

Desde hace largo tiempo se viene trabajando en un plan de rescate para la cooperativa SanCor  dentro del gremio Atilra, quién nuclea a los trabajadores de la firma. 2.000 de sus afiliados dependen de la continuidad de la empresa para sostener sus puestos de trabajo. Para ellos, en las últimas semanas el Gobierno mostró “mayor voluntad política” de acompañarlos, pero el capital de trabajo para que la firma vuelva a niveles rentables de producción todavía no apareció, aunque guardan esperanza con una posible ayuda por parte del INAES o de “un inversor privado”.



El proyecto del sindicato contempla, en líneas generales, acceder a capital para comprar leche y procesar más con el objetivo de recuperar posición en las góndolas, en productos claves como los quesos. Con este objetivo, propusieron un fideicomiso en el Banco BICE, a partir del cual se trabaje sobre las cuestiones financieras para llegar a un acuerdo de quita de deuda con sus acreedores.



Pero el eje del problema se encuentra en la deuda financiera que presenta la cooperativa láctea, que viene de perder muchas unidades productivas en los últimos cinco años. El Estado posee deudas por cobrar a través de la AFIP y otras reparticiones publicas por un total de alrededor de $6.000 millones, otros $6.000 millones en deudas con proveedores, el gremio, empleados, etc. A esto hay que sumarle la deuda en dólares con privados que está repartida entre u$s33 millones con un fondo de inversión holandés, u$s71 millones con el fondo de inversión local BAF y otros u$s18 millones con Sancor seguros.



Sin embargo, por el momento no fue presentada una propuesta viable para el rescate de la cooperativa. En tanto, desde el Gobierno hacen foco que SanCor tiene entre sus pasivos una deuda de 1.200 millones de pesos al FONDEP (Fondo Nacional de Desarrollo Productivo) de la gestión anterior.



Respecto a su deuda con la AFIP, Héctor Ponce, secretario general de Atilra destacó que “el primer paso importante del Gobierno nacional vino de la AFIP y su titular, Mercedes Marcó del Pont, que cambió los parámetros para que se le pueda refinanciar su pasivo, tomando en cuenta que es una empresa de la economía solidaria y que ha sido un factor clave en el desarrollo de la lechería nacional”.



Al momento, la empresa tiene bajo su órbita a seis plantas que están ubicadas las localidades de Sunchales, Gálvez, San Guillermo, en Santa Fe y en La Carlota, Balnearia y Devoto en Córdoba. En este marco, remarcan que el plantel de personal se mantendrá intacto y en simultáneo se le ofrecerá a los acreedores privados y estatales “una capitalización” en la firma. (Filo News)


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