El Centro de Promoción de Derechos como ejemplo de estado presente y generador de oportunidades
Alrededor de 1200 niños y adolescentes pasan anualmente por el Centro de Promoción de Derechos ubicado en Congreso 390, un lugar de contención y oportunidades en donde se aprende también a defender derechos. Herrería, panificados, electricidad, carpintería, peluquería, cerámica, jardinería, mecánica, crochet, manicuría y distintas alternativas lúdicas para los más chicos ya convirtieron a este lugar en un clásico para adquirir conocimientos de oficio y así enfrentar con más preparación las oportunidades de trabajo en ese futuro inmediato.
Son 4 años de trabajo permanente en donde se han ido incrementando las alternativas, las disciplinas, con cada vez más talleres, cursos y diversificando la oferta en base a la demanda de la comunidad; una política pública que va convirtiendo al Municipio en un lugar de promoción de los derechos fundamentales y al estado como facilitador de alternativas y oportunidades para los chicos y los más jóvenes.
La tarea se dispara desde la Secretaría de Niñez Adolescencia y Familia y se convierte en una pata trascendente para aquellas personas que se encuentran vulneradas o que no tienen la posibilidad de acudir a otros lugares a capacitarse o formarse.
Días atrás un grupo de peluqueras que aprendieron a cortar en los cursos de peluquería del Centro de Promoción de Derechos acudió al lugar para realizar cortes de pelo gratuitos; ese es el sentido de pertenencia y de comunidad que convierten a este lugar en un símbolo del estado como promotor de oportunidades.
Este sábado ese lugar cumplió 4 años de existencia y lo celebró con la entrega de certificados y diversas propuestas junto al Intendente de la ciudad Pablo Grasso.
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Inició el ciclo anual de talleres en el centro de promoción de derechos
