Recortes al gasto social: jubilados, ex combatientes y estudiantes entre los afectados
El ajuste del gasto en enero golpea a sectores como jubilados, ex combatientes y estudiantes, contradiciendo la promesa de no afectar a la "casta". El cierre del Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI) se interpreta como una señal política de reducción de gastos de "militancia".
El recorte de gastos implementado por el gobierno en enero ha tenido consecuencias notables en diversos sectores, afectando a jubilados, ex combatientes de Malvinas y estudiantes, contradiciendo la promesa de no afectar a la "casta". Este ajuste se produce en el contexto de un superávit fiscal de $2 billones y uno financiero de $518.000 millones, logrado mediante un recorte del 39% real, el más grande de los últimos 30 años.
Según economistas de la Asociación Argentina del Presupuesto Público (ASAP), el componente del gasto público más afectado fue el social, que representa casi la mitad de los gastos del Estado. Los jubilados de Régimen de Reparto, por ejemplo, registraron un incremento nominal del 117,5%, pero una caída real del 38,6%. El programa de Reparación Histórica muestra compromisos por $37.953 millones, con una suba nominal del 93,1% y una baja real del 45,5%.
Los veteranos de la Guerra de las Malvinas también fueron alcanzados por el recorte, con las Pensiones para Ex-Combatientes y los de la Ley Nº26.913 mostrando erogaciones por $10.008 millones, con una suba nominal del 125,3% y un recorte real del 36,4%.
El reporte de ASAP revela que las transferencias de capital a empresas del Estado y los Fondos Fiduciarios, que el gobierno pretende eliminar mediante un DNU, recibieron cero peso en enero, representando un recorte del 100%. Esto incluye a todas las operadoras ferroviarias, Aerolíneas Argentinas, Aysa y empresas energéticas.
En el desglose de las transferencias corrientes, las partidas más relevantes del gasto primario experimentaron disminuciones significativas. Prestaciones a la Seguridad Social (Jubilaciones y Pensiones) disminuyó un 36,4%, las Transferencias Corrientes cayeron un 19,7%, y las Remuneraciones bajaron un 17,1%. Solo los fondos destinados a políticas alimentarias registraron un aumento real del 4%, mientras que las asignaciones a provincias, universidades y programas como Potenciar Trabajo sufrieron importantes reducciones.
La Asignación Universal por Hijo cayó un 2%, y las becas a estudiantes se eliminaron, reflejando un gasto devengado de cero peso en enero. Las únicas transferencias que experimentaron un crecimiento fueron las relacionadas con el transporte, con un aumento del 147% en subsidios por $99,246 millones, que el gobierno posteriormente eliminó.
