Emergió a la luz

Durante muchos años en nuestra provincia una sola voz logró
concentrar casi todo el poder y monopolizar temas y decisiones que nos
concernían a todos. Pese a los tibios intentos de las alternativas opositoras
la sociedad convalidó que el escenario público estuviese diseñado tan solo para
el aplauso o el silencio, sin importar que en la práctica se hayan dejado de
lado elementales herramientas impuestas por el estado de derecho.

En el año 2007 en Santa Cruz esta burbuja estalla y un
hartazgo inmenso se manifiesta en las calles derivando en una flexibilización
del accionar  gubernamental cruzado por
las internas que emergieron a la superficie.

Con 23 años de ejercicio interrumpido del poder en el ámbito
provincial y con 11 años de desempeño en la órbita nacional por parte de una
misma fuerza política, ha quedado expuesto lo que se sospechaba desde un
principio: un monumental nivel de corrupción que ha servido para enriquecer a
supuestos empresarios y funcionarios de gobierno, quedando también en evidencia
que los pilares de este denominado modelo se reducían a algo muy sencillo: la
generación de herramientas políticas y económicas con la finalidad de
permanecer en el poder por muchísimos años más.

Para hacerlo necesitó contar con  una sociedad aquietada, dependiente y
conformista, ya sea por un ejercicio autoritario del poder (exarcebación de la
lógica amigo/enemigo) o por el otorgamiento de beneficios económicos concretos.

Este 2015 que se avecina nos encuentra como sociedad ante la
posibilidad de elegir un nuevo período de gobierno y con la disyuntiva que los
analistas reducen a la dicotomía continuidad o cambio.

Mi esperanza es que apostemos a un cambio razonable
consolidando los beneficios logrados y potenciando las energías sociales con un
gobierno que reestablezca las reglas de una convivencia abierta y
participativa.

*Eduardo Sosa, abogado, Ex Procurador  General de Santa Cruz