Adiós al cheque papel: el Banco Central evalúa hacerlos 100% digitales

Lo adelantó hoy el vicepresidente de la entidad, Lucas Llach, en un encuentro organizado por la Asociación de Marketing Bancario Argentino (AMBA); buscan impulsar el uso de tecnología.


Depositar un cheque, por sencilla que
parezca la tarea, no siempre lo es. Por lo pronto,exige tiempo: las terminales
de autoservicio de los bancos suelen estar abarrotadas, y ni hablar cuando hay
adelante una persona que hace varios trámites al mismo tiempo. Pero, además,
cualquier distracción en el endoso puede provocar que el documento sea
rechazado por el banco, y que el trámite vuelva a foja cero. El cheque papel, sin
embargo, pronto podría ser sólo un recuerdo, dado que en el Banco Central
(BCRA) están trabajando para poder lanzar pronto un sistema de cheques
exclusivamente digitales.


"Estamos trabajando con los bancos
para el cheque puramente electrónico", anticipó Lucas Llach,
vicepresidente del Central. "El cheque es de otra época, cuando estamos en
un mundo electrónico; el papel es de otra época. Si lo pudiéramos hacer
electrónicamente tiene ventajas: se puede partir fácilmente, transferir más
fácilmente", dijo el economista que participó esta mañana del 17 Congreso
Internacional de Tecnología organizado por la Asociación de Marketing Bancario
Argentino (AMBA).


Llach aseguró que el Banco Central tiene
una visión muy optimista de la tecnología, incluso llamó a muchos de los
banqueros presentes a que planteen en la entidad financiera innovaciones
"que hoy no se pueden hacer".


"El sistema financiero necesita una
revolución tecnológica", subrayó Llach. "La estadística muestra que
las tecnologías impulsan la demanda de trabajo, porque hay más competencia por
trabajadores y los salarios aumentan", continuó, en referencia al debate
hoy presente en el mundo entero, sobre el impacto que las nuevas tecnologías
pueden tener en el mundo laboral.


Para el vicepresidente del Central muchas
veces se piensa en la tecnología en términos del impacto que tiene en la
oferta, pero no en los demandantes. "Una revolución tecnológica en la
industria bancaria afecta a toda la sociedad un poco, pero a la industria
financiera, más. Pero el impacto de la tecnología también es la democratización
-dijo Llach-. Lo que está pasando en la industria financiera es una revolución,
que baja costos, y cuyo principal efecto es la inclusión. Porque permite proveer
servicios a un costo menor, y de una manera más simple", resumió.


Otra innovación en la que trabaja el
Central es la de la "identidad digital", esto es, poder aplicar la
biometría para reemplazar el uso de claves. "Estamos trabajando con el
Renaper para que sea más fácil el acceso. Que uno pueda acceder a todos los
servicios financieros de esa manera", dijo Llach.


El BCRA promete ir a fondo con la
aplicación de las nuevas tecnologías, aunque sabe que en el camino se
encontrará con varios escollos. Como cuando quiso a comienzos de la nueva
gestión eliminar el envío de resúmenes de cuenta en papel, y se topó con una
fuerte presión de las empresas de correo -y sobre todo el gremio Camioneros-,
que lo obligó a moderar la implementación de la norma.


O también cuando decidió facilitar la
creación de fintechs, o compañías de internet dedicadas al negocio financiero,
lo que le valió recientemente críticas de los bancos. Las entidades le
reclamaron al BCRA que aplique los mismos controles y exigencias que aplica en
el sistema financiero a empresas como Mercado Pago. En tal sentido, sin
adentrarse en la polémica, Llach simplemente deslizó ayer el mismo argumento
que en su momento usó el titular del Central, Federico Sturzenegger : nada
impide que los bancos armen sus propias fintechs.


"Queremos reglas para un sistema
competitivo, que los bancos armen sus propias fintechs para que puedan usar las
nuevas tecnologías", dijo Llach.


En los próximos meses, afirmó Llach, el
BCRA espera seguir avanzando en el mercado de medios de pago, para que haya
nuevos -y muchos- adquirentes que ofrezcan tarjetas de crédito. Hoy en el
mercado el líder es Prisma, la empresa propiedad de los bancos que es dueña de
Visa. La empresa está bajo la lupa de la Comisión Nacional de Defensa de la
Competencia (CNDC), quien la conminó a presenta un plan de desinversión.


A partir del 14 de agosto,además, todos los
bancos deberán tener implementado el "Debin",como se llama el sistema
de débitos, por el cual se invierte el orden de una transferencia bancaria. En
este caso, una persona genera una orden de un débito, y luego el dueño de la
cuenta bancaria debe decidir si lo acepta o no.


También, dijo Llach, espera que crezca la
cantidad de cajeros automáticos de entidades no bancarias. "La Argentina
tiene uno de los peores índices de tarjetas de débito versus cajeros. Cuando
uno sabe que la plata está accesible, es cuando uno usa el dinero
electrónico", dijo Llach, quien se defendió así de quienes cuestionan que
la medida atenta contra el objetivo del Central de desalentar el uso de
efectivo. "Cuanto más uno pueda conectar la red de dinero electrónico con
el efectivo, más se va a usar el dinero electrónico, porque es más sencillo y
seguro. Por eso desregulamos para que las entidades no bancarias puedan cobrar
para el uso de cajeros", explicó. lanacion.com.ar