Alberto Fernández y CFK cenaron el jueves y no se ponen de acuerdo sobre el reemplazante de Losardo

El jueves a la noche, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner cenaron a solas en la Quinta de Olivos. El principal tema que trataron en un extenso diálogo fue quién debería ser él o la reemplazante de la ministra de Justicia, Marcela Losardo, quien continúa en funciones pero ya anunció que abandonará el puesto.

Según consigna Clarín, la charla entre ambos no logró un consenso sobre el nombre y por eso se atrasa el nombramiento del nuevo ministro de Justicia. El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, había anunciado que el jueves se conocería el nombre suponiendo que surgiría de la cena entre el presidente y la vicepresidente, pero no pasó.

Alberto Fernández se resiste a que el Ministerio de Justicia sea comandado por alguien que responda totalmente a Cristina Kirchner. El mandatario está muy molesto con la renuncia de Losardo, su amiga desde la juventud y socia en su estudio jurídico. Losardo pasó a sentirse incómoda cuando el discurso de Fernández se alineó con el del kirchnerismo duro en la apertura de la Asamblea Legislativa.

Tras el discurso de Alberto, el senador K Oscar Parrilli propuso la creación de una comisión bicameral legislativa para controlar el trabajo de jueces y fiscales. Losardo salió a descartar esa idea al considerarla inconstitucional.

Según Clarín, Alberto cree que la renuncia de Losardo es culpa de las continuas operaciones de desgaste impulsadas por Cristina Kirchner y su sector. Para la vicepresidenta, Losardo no estaba comprometida con la batalla del oficialismo contra el Poder Judicial.

Losardo seguirá en su cargo hasta que se conozca el nombre de su reemplazante y luego asumirá en la embajada ante la UNESCO en París. Alberto quiere que la reemplace alguien que se identifique con él y no que le deba lealtad a Cristina Kirchner.

Fernández dilata el nombramiento del reemplazante de Losardo porque primero quiere consensuar con su vice cuál será el rumbo que tomará el Gobierno contra el Poder Judicial más allá de lo discursivo. El nuevo ministro de Justicia se definiría en charlas telefónicas entre Fernández y Kirchner, pero por ahora sigue la danza de nombres.

mdzol