Brasil busca comprar unas 10 millones de dosis de la vacuna Sputnik V

El Ministerio de Salud de Brasil anunció este viernes que el Gobierno planifica la adquisición de 10 millones de dosis de la vacuna rusa Sputnik V una vez que el ente regulador local la autorice y pueda ser producida en el país por un laboratorio nacional.

Tras la confirmación de la eficacia del 91,6% por parte de la revista científica The Lancet, las autoridades brasileñas comienzan a centrar sus esfuerzos para favorecerse del un acuerdo entre Rusia y el laboratorio privado brasileño Uniao Quimica, que tiene fábricas en Brasilia y en Guarulhos, estado de San Pablo.

"Compraremos diez millones de dosis iniciales, si el precio es plausible, y efectuaremos el pago luego de que la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) autorice el uso e emergencia de la Sputnik V", señaló la cartera sanitaria en un comunicado divulgado por los medios periodísticos.

Actualmente, el país sudamericano posee más de 10 millones de vacunas: 8 millones de Coronavac, de la china Sinovac, y otros 2 millones de AstraZeneca-Oxford.

Al poco tiempo de conocerse los datos sobre la eficiencia de Sputnik V, Anvisa mantuvo un encuentro con el laboratorio Uniao Quimica para realizar una serie de modificaciones en las exigencias para la aprobación de este tipo de fármacos.

Antes del cónclave, Fernando de Castro Marques, presidente do grupo União Química, manifestó: "Creo que las autoridades brasileñas, en el ámbito de la vigilancia sanitaria, el Ministerio de Salud, el Ejecutivo, el Legislativo, no tendrán más dudas en aprobar la vacuna para uso en territorio brasileño".

Al finalizar la reunión, se informó que no será más necesario hacer ensayos de fase III en humanos en territorio brasileño, como sí debieron hacer durante cuatro meses el Instituto Butantan de San Pablo con la CoronaVac y el laboratorio federal Fiocruz en Río de Janeiro.

Uniao Quimica comunicó que a partir de abril estará en condiciones de fabricar las vacunas con la transferencia de tecnología del Instituto Gamaleya.

Fuente: Ambito Financiero