"Descargar la crisis sobre los trabajadores no es un “logro”, sino una infamia"
Así lo indicaron desde el Partido Obrero ante la continuidad del gobierno kirchnerista en Santa Cruz.
A continuación, un planteo de Miguel Del Pla, referente del Partido Obrero.
Las ceremonias de estos días están plagadas de discursos mentirosos, pero uno sobre el que debemos poner atención, por su trascendencia provincial (y nacional) es el de Alicia Kirchner y sus funcionarios a la hora de balancear la acción de gobierno en Santa Cruz 2015-2019.
Sin dudas que la situación de la provincia hace 4 años era en extremo crítica y eso lo remarcan los funcionarios que se “victimizan” por el rol que les tocó vivir. La evaluación al fin del periodo es que esa crisis sirvió como una justificación, para atacar a fondo el nivel de vida de los empleados públicos y jubilados provinciales, con aumentos salariales tan distantes de la inflación, que han provocado una caída del 60 % en la capacidad de compra de quienes cobran sueldos de la provincia.
Las huelgas y movilizaciones estallaron en 2016 y 2017. Los trabajadores como pudieron se defendieron de este golpe brutal que incluyó atrasos en los pagos y al principio cientos de despidos. Los acampes, huelgas y la heroica lucha de los jubilados han hecho historia. El gobierno aplicó el ajuste y se “escondió” en la Casa de Gobierno, a esperar “que pase la tormenta”. En muchas oportunidades ese “encerrarse” se complementó con violentas represiones a los trabajadores en lucha.
¿Quiénes fueron las víctimas y los victimarios en esta situación? Cae de maduro…
Alicia tuvo otra carta, para hacer pasar el ajuste y fue el llamado Acuerdo Social Santacruceño. Una parte de la Mesa de Unidad Sindical (ATE) se postró ante este “pacto social” muy parecido al que nos ofrece ahora Alberto F. y eso ayudó a que el gobierno de Alicia sin entregar nada, lograra sobrevivir a la lucha de miles y miles de trabajadores movilizados.
Luego cuando pudo retomar en parte la iniciativa política, Alicia judicializó las protestas de los jubilados e hizo procesar a varios dirigentes de la CTA y la ADOSAC.
EL ENDEUDAMIENTO
Santa Cruz no se endeudó porque no pudo, pero el gobierno ahora está orgulloso de no haberse endeudado. La voluntad de endeudarse quedó de manifiesto en una sesión que se desarrolló en el marco de una brutal represión, frente a la legislatura en 2016, donde los gremios nos manifestábamos contra la autorización a endeudarse. La oposición fue desalojada del recinto con los bomberos por “razones de seguridad” y antes de que regresara, el oficialismo kirchnerista ya había votado la autorización para endeudarse por 10 mil millones de pesos o su equivalente en dólares. Solo los gremios combativos mantuvieron en este tema la coherencia rechazando el endeudamiento y exigiendo que la crisis la paguen las mineras y las petroleras.
Las negociaciones para tomar esa deuda se dificultaron, en parte por errores propios, en parte por trabas del gobierno nacional y así llegamos a mediados de 2018 en que el propio gobierno de Alicia recién allí renuncia a endeudarse, en vistas de las masivas devaluaciones, y de que la inflación ya se había “comido” los salarios y jubilaciones, la coparticipación había crecido por vía de esa misma inflación y las regalías habían pegado un salto gigante con la devaluación de la moneda. El gobierno no “había hecho nada” pero los números podían cerrar sin endeudamiento.
EL SACRIFICIO LO PAGAMOS completamente LOS LABURANTES. EL AJUSTE HACIA ABAJO DE LOS SALARIOS SUPERO AMPLIAMENTE AL QUE PUDO REALIZAR MACRI A NIVEL NACIONAL. Alicia puede darle clases de
ajuste al propio Macri, a tal punto que ha sido reconocida en una reciente reunión por parte de ADEBA (Banqueros) en la que los Bancos vieron “oportunidades” en nuestra provincia.
EL AJUSTE CONTRA LA SALUD Y LOS JUBILADOS
Alicia Kirchner no necesitó cambiar la Ley jubilatoria para ajustar a los jubilados, ya que el 82 % móvil que es una gran conquista vigente, se transformó en su contrario con el congelamiento de los salarios en la provincia. Al cabo de 4 años los aumentos porcentuales a los jubilados estuvieron muy lejos por detrás del ANSES, en cualquiera de sus fórmulas tramposas.
Otra consecuencia de la caída salarial fue el desfinanciamiento de la obra social provincial (CSS), cuyos ingresos atados a salarios desvalorizados, se contrapusieron a costos de prestaciones y medicamentos dolarizados.
Para colmo al plantear la “normalización” de la CSS y haber votado hace unos días la ley que pondría fin a 32 años de intervención, se terminó destapando una estafa contra la obra social, consistente en que los municipios y algunos organismos del Estado Provincial no han hecho los aportes a la CSS durante décadas y generando una deuda solo de los municipios de 3900 millones de pesos según la versión del propio Interventor Esteso.
La estafa consistió en que la Caja durante todos estos años recibió menos fondos que los que por ley le corresponden y así se lesionaron las prestaciones, se retacearon derivaciones y se acumuló una deuda con prestadores cercana a los dos mil millones de pesos. Como la CSS era superavitaria, el kirchnerismo la exprimió como a una naranja y derivaron fondos de la salud hacia otros gastos del estado, bajo la cobertura de las cuentas unificadas controladas por el Ministerio de Economía y la Intervención de la Caja, que ocultó esta situación.
COMPLICES DE LOS DESPIDOS EN EL PETROLEO
El Comisionado de Fomento de Cañadón Seco, hombre del gobierno, acaba de declarar que en estos 4 años se perdieron 3500 puestos de trabajo por despidos y otros 700 por “acuerdos voluntarios” que son despidos encubiertos. Esta confesión es la mejor prueba de que el gobierno de Alicia hizo mil discursos en favor de los puestos de trabajo y hasta dijo que su diferencia con Macri era esa protección del trabajo, pero permitió que las corporaciones petroleras despidieran y siempre miró para otro lado cuando los despedidos eran delegados combativos o de oposición dentro del gremio petrolero.
La Legislatura trató el tema y en lugar de sacar una Ley Antidespidos, se contentó con una apelación a la Gobernadora para que “gestione” ante las empresas que no despidan personal. Los diputados se lavaron las manos y la Gobernadora disimuló de ahí en más los despidos como “retiros voluntarios”. Las empresas impusieron sus condiciones y ninguna concesión petrolera fue revertida a las multinacionales por el Estado Provincial.
LAS MINERAS, GRANDES GANADORAS
El secretario de Minería Bilardo, ha informado que en 4 años desde Santa Cruz se exportaron 5 millones de onzas de oro y más de 100 millones de onzas de plata. El monto anual de esta facturación fue por ejemplo en 2019 de alrededor de 90 mil millones de pesos, o sea un presupuesto y medio del Estado Provincial, que fue este año de 57 mil millones. Las regalías mineras para el periodo no llegarán a los 2 mil millones. El
yacimiento Cerro Negro, que es la estrella ha sido adquirida por Newmont, la minera más grande del mundo. En un país que no tiene reservas en divisas, una reserva de valor como el oro se exporta por miles de millones de dólares. Alicia Kirchner y Alberto Fernández ya se reunieron en persona luego de las PASO, con los agentes de las mineras y les dieron garantías para la continuidad de este negocio contaminante y ruinoso para el país. El contraste entre el florecimiento del negocio minero con la miseria extrema de los sueldos provinciales o de los despedidos es brutal y claro… Alicia lo hizo.
Un fideicomiso miserable llamado “Plan Unirse” ha sido presentado por el Gobierno Provincial como salida “original” a estas contradicciones. Se trata de que las mineras, aporten fondos para obras o gastos del Estado, en forma voluntaria y condicionada a los valores internacionales de la onza de oro.
La obsecuencia de los Kirchner para con el gran capital minero, petrolero y de la pesca, todas concesiones entregadas por el clan K en 30 años de gobierno provincial, son el verdadero sello, la verdadera esencia de su gobierno y de su fracaso en desarrollar la economía de Santa Cruz.
RIO TURBIO ADELANTA LA CRISIS GENERAL
Los desocupados de la Cuenca Carbonífera han formado un potente movimiento en pos de ingresar a la empresa o a algún puesto de trabajo en esa zona. Ninguna autoridad, ni nueva ni vieja, ni municipal ni provincial, ni de la empresa YCRT ni del Gobierno Nacional está dando respuestas.
En Río Turbio más brutalmente que en otras regiones, se choca la expectativa popular en el nuevo gobierno con las políticas reales que este viene a realizar. Son años de postergaciones que vienen desde antes del ascenso de Macri al poder. Desconocimiento de los convenios, cientos de despidos, cese del pago de parte de las jubilaciones por parte de YCRT, paralización de las obras de la usina. El ajuste en YCRT lo hizo Macri con Costa y Zeidán, pero lo dejó pasar Alicia, que solo jugó un papel declarativo, ya que el desconocimiento de los convenios y la falta de figura legal de la empresa durante el gobierno de Cristina, prepararon el terreno del ajuste macrista.
El Partido Obrero reclama trabajo para todos sin discriminaciones, puesta en marcha de las obras, de la mina y de la usina, resolución de los problemas de seguridad en interior de mina y una carboeléctrica estatal bajo gestión de los trabajadores y la población de la Cuenca.
SUPERAVIT TRUCHO y PARITARIAS AL FREEZER
Cuando un ajuste como el aplicado en Santa Cruz produce un retroceso histórico en las condiciones de vida de 70 mil empleados públicos y jubilados ¿Se puede llamar al resultado de ese ajuste con la palabra “superávit”? ¿Se puede considerar un “equilibrio de las cuentas públicas” este desastre? Eso solo es posible porque en la contabilidad capitalista, financiarse rebajando salarios no configura una deuda con los trabajadores (y como vimos más arriba hasta pueden estafar impunemente a sus obras sociales). LA DEUDA ES CON LOS TRABAJADORES Y DEBE SER RECONOCIDA.
De todos modos luego de ufanarse del superávit la Gobernadora anunció un déficit para el Presupuesto 2020, déficit “dibujado” por la inclusión de fondos para obras (no identificadas) por varios miles de millones.
Es que el ajuste no ha terminado: el Gobierno acaba de levantar la paritaria de los estatales y ha obligado a un gremio oficialista como es ATE, a declarar en medio de los festejos de la asunción un paro de 48 horas los días 11 y 12 de diciembre. Este paro empalmó con el de la ADOSAC que también paró 48 horas esta semana.
Alicia Kirchner no quiere comprometer un peso para el futuro, antes de que Alberto Fernández muestre todas sus cartas (o quizás precisamente porque conozca esas cartas). La paritaria pasó para Febrero-Marzo.
Descargar la crisis sobre los trabajadores no es un “logro” sino una infamia.
La recuperación del salario y los puestos de trabajo exige un plan de lucha que unifique a los trabajadores, y por eso planteamos un nuevo plenario de trabajadores, más amplio que los anteriores que hubo en Santa Cruz y un programa de independencia de clase, para que la crisis la paguen los capitalistas.
Miguel Del Pla
Por el Comité Provincial del Partido Obrero