La Argentina asciende a la categoría de "emergente" y podrían ingresar capitales por hasta u$s5.500 millones

El país había perdido esa condición en 2009. Expertos destacan que, tras esta decisión, inversores institucionales del mundo quedarán habilitados para ingresar al mercado local. El upgrade se haría efectivo en mayo de 2019

En un "súper miércoles" para el Gobierno, finalmente se confirmó que la Argentina ascendió a la categoría de "mercado emergente", abandonando así su nada deseable estatus de país de "frontera", condición que arrastraba desde el año 2009. 



Con este veredito de la calificadora MSCI, que se conoció a las 17.30 hora local, el país logra el tan ansiado ascenso y queda otra vez en una categoría que lo condena al ostracismo financiero.



Esta decisión se suma a la formalización del crédito del FMI que se anunció en Washington, lo que permitió redondear una jornada cargada de buenas noticias para el Gobierno. 



Tras esta decisión, la Argentina pasa a tener una demanda potencial de activos por parte de inversores estimada enunos u$s3.800 millones, según Morgan Stanley. En cambio, analistas de JP Morgan elevan esa cifra au$s5.500 millones. 



Cualquiera sea el número, el efecto será positivo, ya que ese caudal le daría un fuerte impulso al mercado de valores. 



Si bien ese upgrade recién se haría efectivo en mayo de 2019, se prevén rápidos y significativos repuntes en las cotizaciones, ya que los operadores suelen anticiparse a este tipo de circunstancias.



También, y más allá de las cifras, redundaría en una fuerte revalorización de los precios de las acciones de varias empresas. 



¿Por qué se generaría ese mayor caudal? Básicamente, porque permitiría que muchos inversores institucionales del mundo queden habilitadospara ingresar al mercado local.



"Una reclasificación genera, entre otras ventajas, que los ETF o los fondos de administración pasivos deban rearmar sus carteras para adecuarse al nuevo índice MSCI Emerging Markets, que pasaría a contar con activos argentinos", señalan desde la firma Balanz.



"Al dejar de ser mercado de frontera, muchos de esos fondos que antes no podían invertir, porque sus propios estatutos lo impiden, quedarán liberados de tal restricción", señala Diego Martínez Burzaco, director de MB Inversiones.



"Así, crece la demanda por bonos y acciones argentinas, disminuyendo el rendimiento que ofrecen estos activos", completa.



Backstage del "asenso" 

La decisión final de hacer reingresar a la Argentina al grupo de "emergentes" la tomó el comité interno del MSCI. En total, son seis directivos quienes emiten un veredicto, que luego es revisado por un segundo comité que finalmente certifica lo determinado.



Los expertos evaluaron tres grandes categorías que determinan la decisión del comité: Desarrollo económico, Requerimientos de tamaño y liquidez, y Criterios de accesibilidad de mercado.



La posibilidad de un upgrade comenzó a tomar fuerza hace unos días, cuando Morgan Stanley adelantadó en un informe para sus clientes que Argentina probablemente iba a escalar una posición en el ranking MSCI. 



Si bien en ese documento se señaló que se estaba avanzando en reformas económicas estructurales importantes, consideraron que lo más destacado pasa por la arista política: "Creemos que hay un horizonte político de 3-5 años".



Sobre la marcha del país, el informe resaltó que "la economía argentina estáorientada a ajustar el déficit y reducir el sesgo contractivo en lo monetario".



Además, consideró que "la sustentabilidad de la deuda luce manejable gracias al crecimiento esperado de la actividad y un déficit fiscal a la baja".



Con la confirmación de este miércoles, el macrismo se tomó "revancha" del frustrado ascenso, en 2017. 



Pese a que la Argentina era gran favorita para escalar de categoría, se dieron una serie de circunstancias que lo impidieron.



Por ejemplo, la falta de avance en reformas consideradas clave, como la tributaria, la previsional y el pacto fiscal con las provincias. 



Uno de los argumentos para frenar el ascenso en ese entonces fue que aún debía quedar demostrado que las mejoras económicas y las modificaciones impulsadas por el Gobierno son "irreversibles". (IProfesional)