Lázaro se mostró con Peralta y Rudy Ulloa inauguró su lujosa casa
Ayer no fue un día más para dos hombres que supieron hacer una riqueza de su amistad con Néstor Kirchner. Mientras uno se mostró cercano al gobernador, el otro inauguró por la noche una lujosa casa en pleno centro de la ciudad. Hubo festejo íntimo.
El miércoles 29 de agosto de 2012 quedará marcado en la vida de dos hombres que supieron forjar una verdadera fortuna por su amistad con el fallecido ex presidente de la Nación, Néstor Kirchner.
Durante la tarde, sorprendió a propios y extraños la aparición pública del empresario Lázaro Báez durante una recorrida de obra, mostrándose por primera vez muy cerca del gobernador Peralta, en lo que muchos especulan puede ser el comienzo de una carrera política.
Horas después, ya por la noche, llegó un día especial para “Rudy” Ulloa, ex chofer de Néstor Kirchner y amigo de Máximo Kirchner, quien luego de casi dos años de haber adquirido una propiedad en el centro de la ciudad pudo inaugurarla con su entorno íntimo, con una cena que se extendió hasta la medianoche.
Se trata de una vivienda unifamiliar, realmente de lujo, que “Rudy” logró construir por completo luego de haberla adquirido como una construcción que no había avanzado de la primera fase de obra.
Según se supo, el empresario adquirió la propiedad que se ubica en Mascarello y Roca en aproximadamente 300 mil dólares y casi dos años después la inauguró con un valor que alcanza los 800 mil dólares, con detalles realmente lujosos, siendo la envidia de los vecinos del lugar y cualquiera que pasa y la observa con detenimiento.
La obra requirió el trabajo de casi 20 obreros que trabajaron sin cesar día y noche durante más de un año y medio (aún hoy continúan con pequeñísimos detalles) para que nada quede librado al azar.
A su gusto
La lujosa vivienda que se inauguró durante la noche de ayer, con la visita de familiares y amigos del entorno íntimo del empresario “K”, que durante el último mes de trabajo en el lugar visitó diariamente con su camioneta negra Jeep 4x4, junto a su mujer Jésica Uliarte, quien ahora vive a unas pocas cuadras de la casa que Cristina Fernández tiene en la costanera local, donde descansa en sus visitas a Río Gallegos.
Un detalle no menor marca el temor de la familia Ulloa a la inseguridad, ya que en las puertas de acceso a la vivienda se instalaron cámaras de seguridad de alta complejidad que complementan el trabajo de los hombres de seguridad que amanecen en camionetas y autos justo enfrente de la vivienda.
Lo cierto es que ayer no fue un día más para dos hombres que tienen vidas paralelas, aunque con objetivos diferentes, ahora ya sin la presencia del hombre que los ayudó a vivir de la manera que hoy lo hacen. (El Diario Nuevo Día)