OMS y Unicef en alerta por un dato preocupante de la vacunación pediátrica

Los especialistas de la Organización Mundial de la Salud y de Unicef llevan tiempo notando una alarmante tendencia en la vacunación pediátrica. La misma se intensificó con la pandemia de covid-19 y la desinformación, podría tener graves consecuencias y ser difícil de revertir.

La Organización Mundial de la Salud y Unicef generaron una alerta roja por la caída continua de la vacunación pediátrica. La misma importante de los últimos 30 años, según un informe conjunto entre ambos orgasmos. Entre las razones señalan que hay crecido el número de niños que viven en contexto extremadamente vulnerables o de conflicto, a la mayor circulación de información errónea y a "problemas relacionados con el covid-19, como interrupciones en el servicio y la cadena de suministro, desvío de recursos a los esfuerzos de respuesta y contención. medidas que limitaron el acceso y la disponibilidad de los servicios de inmunización".



La proporción de niños que reciben las tres dosis de la vacuna contra la difteria, el tétanos y la poliomielitis (DTP) cayó del 86% en 2019 a solo el 81% en 2021. Esta vacuna se utiliza como indicador clave de la cobertura de inmunización en todo el mundo. Según el informe, 25 millones de niños no recibieron una o más dosis de DTP a través de los servicios de inmunización de rutina solo en 2021.



Esto es 2 millones más que los que se perdieron en 2020 y 6 millones más que en 2019, de acuerdo a lo que especifica el informe conjunto de la OMS y Unicef. Claramente significa que hay un número cada vez más grande de niños expuestos a enfermedades que podrían ser devastadoras y que son prevenibles.



En Argentina, la vacuna que previene esas enfermedades es la pentavalente que, de acuerdo a lo que indica el Calendario de Vacunación, se coloca en tres dosis a los 2, 4 y 6 meses respectivamente y con un refuerzo al año y medio al que se suma un segundo refuerzo -la triple bacteriana- a los 5 años. 



La alarma se enciende porque, tras décadas de mejoría, con un mayor alcance de la población pediátrica vacunada, los números comenzaron a descender. Hubo una drástica caída en 2020 y a pesar de la recuperación, la tendencia parecería indicar que pasarán años antes de alcanzar los niveles previos a la pandemia. 



Otra de las vacunas cuya aplicación bajó en forma alarmante es la que previene el HPV (virus del papiloma humano). El informe indica que, a nivel mundial, se ha perdido más de una cuarta parte de la cobertura de vacunas contra el HPV que se logró en 2019. "Esto tiene graves consecuencias para la salud de las mujeres y las niñas, ya que la cobertura mundial de la primera dosis de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) es solo del 15 %, a pesar de que las primeras vacunas se autorizaron hace más de 15 años". 



Según Catherine Russell, directora ejecutiva de Unicef, "esto es una alerta roja para la salud infantil. Estamos asistiendo a la mayor caída continuada de la inmunización infantil desde hace una generación". Además, alertó que "las consecuencias se medirán en número de vidas". 



El informe indica que el descenso en la tasa de vacunación es la causa de brotes de sarampión y poliomielitis que tuvieron lugar en los últimos 12 meses. Russell expresó que es urgente tomar medidas en el asunto. "Si bien se esperaba una resaca pandémica el año pasado como resultado de las interrupciones y bloqueos de covid-19, lo que estamos viendo ahora es una disminución continua. El covid-19 no es una excusa. Necesitamos ponernos al día con la inmunización de los millones que faltan o inevitablemente seremos testigos de más brotes, más niños enfermos y una mayor presión sobre los sistemas de salud ya sobrecargados", explicó. 



Por su parte, Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, enfatizó que "la planificación y la lucha contra covid-19 también deben ir de la mano con la vacunación contra enfermedades mortales como el sarampión, la neumonía y la diarrea. No es una cuestión de uno u otro, es posible hacer ambos”.