Vecinos rescataron por una ventana a una madre y a su hija atrapadas por las llamas
Momentos de desesperación vivieron una madre y sus dos hijos, de 6 y 10 años, al incendiarse su vivienda a causa de un cortocircuito. El fuego se inició cerca de la puerta de acceso y se extendió hacia el interior.
El siniestro de vivienda ocurrió ayer alrededor de las 15 en el domicilio de la familia Viruez en la manzana G, lote 7 de la Fracción 14, a media cuadra de la avenida Chile, en Comodoro Rivadavia.
En momentos en que se inició el fuego, el jefe de la familia, Emilio Viruez, estaba trabajando. Se dedica a la albañilería en forma particular.
En diálogo con El Patagónico el hombre explicó que los vecinos me llamaron y me dijeron que fue un cortocircuito”.
La manzana G se ubica en el final de la Chile, donde la casa de dos habitaciones, cocina comedor y baño estaba construida de chapa y madera. Al parecer, el cable que alimentaba a la vivienda y que pasa por el techo de chapa se habría cortado dado que no estaba cubierto con una cañería.
Allí se originaron las llamas cuando la esposa de Emilio y su hija de 6 años estaban en el interior. El varón de 10 años, en tanto, se encontraba en el patio que da al frente del inmueble. El fuego impidió que la madre e hija pudieran salir por la puerta principal y entonces se dirigieron al dormitorio que tenía una ventana que da al frente.
Viruez explicó: mi señora sacó a la nena por la ventana y ella quiso salir y no podía. Ella quedó encerrada, el nene estaba afuera y él quería sacar a su mamá”. Entonces “a mi señora la sacó un vecino porque no podía salir” por el tamaño de uno de los vidrios de 35x35 centímetros.
Las tres víctimas inhalaron humo y fueron asistidas por médicos del Hospital Regional que acudieron a la emergencia. Con lo puesto, los integrantes de la familia fueron llevados a la guardia para ser examinados y horas más tarde recuperaron el alta médica.
PIDEN AYUDA
Viruez agradeció: lo más importante es la vida, lo material se recupera pero la vida no”.
La familia perdió todas sus pertenecias y la niña quedó hasta sin calzado. El fuego destruyó la estructura de la casa.
Asimismo, el jefe del hogar lamentó: voy a tener que hacer todo de nuevo, hay que tumbar y recuperar algo de las chapas porque otra cosa no se recupera. Algunos vecinos rompieron (las paredes) para que no se propagara más el fuego, vinieron muchos a ayudar, valoró.
Contó que con su oficio de albañil “a veces hay y a veces no hay” trabajo.
Durante estos días hasta el domingo se dedicará a desarmar lo que quedó de la vivienda. En ese contexto, la vecinalista del barrio, Mabel Guerrero, pidió la colaboración de la comunidad para darle una mano a esta familia que quedó con lo puesto. Quienes quieran ayudar a la familia Viruez pueden comunicarse al teléfono celular de Emilio: 154627292. (Diario El Patagónico)