El sorprendente caso del loro británico que desapareció y volvió hablando español

Un simpático loro británico que recorre el mundo y aprende nuevos idiomas suena descabellado, pero así es la vida de Nigel. Esta simpática ave vivía en California y, luego de estar cuatro años desaparecido, volvió hablando un nuevo idioma.

Los loros son animales con gran capacidad de aprendizaje e inteligencia, tal es así, que pueden “hablar” y comunicarse con los seres humanos. Dicen los especialistas que son una de las mejores mascotas que una persona puede tener porque son muy fieles y con una gran vivacidad.

Estudios realizados aseguran que los loros tienen una estructura cerebral duplicada a las de otras aves que les ayuda a reproducir sonidos con mayor fidelidad y hasta bailar al ritmo de la música.

Nigel es un loro británico que vivía junto a su dueño y compañero Darren Chiks en California. Los allegados a Darren cuentan que el orgulloso dueño presumía siempre del fluido y acentuado tono inglés con el que hablaba su ave. En 2015, Nigel desapareció de casa, salió volando y no dejó rastros. Su dueño publicó su búsqueda con una foto de él por internet, pero no tuvo noticias prontas de su paradero.

Pasado cuatro años, Julissa Sperling, vecina de Torrance encontró un loro gris que llamó su atención de inmediato. Ella se le acercó y el loro le preguntó: “¿Qué pasó?”

En ese momento fue cuando Julissa se percató de que éste debería tener un dueño que lo estaría buscando. Así fue cómo empezó su búsqueda por internet en sitios y anuncios de loros perdidos en California. Luego de unos días encontró a alguien que buscaba un loro británico gris. Después de un proceso de autentificación en el que colaboró la tienda de animales Animal Lovers, lugar donde fue comprado, fue que Nigel dio con su auténtico dueño. Darren dice haberlo reconocido al instante y estar muy sorprendido de volver a verlo después de tanto tiempo. 

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Pero para la sorpresa de todos, Nigel y su dueño ya no podía comunicarse como acostumbraban en el pasado, al principio el loro estaba un poco confundido y le costó adaptarse nuevamente a su antiguo hogar. Además, el simpático loro sorprendió a su dueño diciendo: “Buenos días” y preguntando por alguien llamado “Larry”.  

También, a veces solía preguntar “¿qué pasó?”. Y la verdad es que ha dejado con la boca abierta a más de una y sólo él sabe que pasó y por cuentos lugares estuvo de visita.