Suecia en vilo por la resolución del "caso policial más grande de la historia"

En las últimas décadas, las novelas policiales suecas se convirtieron en un fenómeno literario global. Lo que no tantos lectores saben es que hay profundos motivos detrás de esas historias jalonadas de noches frías y homicidios. Uno es, seguramente, la obsesión con el hasta ahora irresuelto asesinato del primer ministro Olof Palme, ultimado a tiros el 28 de febrero de 1986. Pues bien: este miércoles las autoridades de Suecia darán una conferencia de prensa en la que podrían develar de una vez por todas la verdad sobre el crimen que se convirtió en un trauma nacional.

Se trata, según algunos periodistas, del expediente penal más voluminoso del mundo, con más de 700.000 fojas y ni un solo detenido. Hay sospechosos por todas partes, teorías conspiranoicas, pistas falsas. Todos los ingredientes de un thriller, pero en la realidad.

Aquella noche de febrero del 86', Palme y su esposa fueron atacados a balazos cuando regresaban del cine. Afable y carismático, el Primer Ministro solía salir sin guardaespaldas. Al llegar a una esquina recibió un plomazo en la nuca que le perforó la aorta. Falleció a los pocos minutos.

¿Fueron los sudafricanos, la ultraderecha chilena, un loco suelto o ninguno de los anteriores?

El hasta ahora desconocido atacante se esfumó entre las calles de Estocolmo. Y fue el comienzo de infinitas suposiciones y contramarchas. La pesquisa demandó millones de dólares; las hipótesis oscilaron entre un posible operativo de los sudafricanos pro-apartheid, un plan de la derecha chilena o simplemente un drogadicto que se confundió de víctima.

Mañana podría conocerse qué pasó en realidad. Se anticipó que los detectives han dado con el arma homicida -a 34 años del crimen- y que eso los habría conducido a los responsables.

Esta madrugada, Suecia está en vilo: quizá falten pocas horas para conocer el mayor misterio de su historia reciente.