Guerra en Ucrania

Rusia lanzó un misil balístico intercontinental en un ataque a Ucrania

Sólo el miércoles las fuerzas rusas lanzaron más de 80 ataques aéreos. Además, los disparos de artillería superaron los 4.000 y se registraron cerca de 1.400 drones kamikaze, aseguran los ucranianos.

Redacción Nuevo Día
Redacción Nuevo Día
eldiarionuevodia@hotmail.com

Las Fuerzas Armadas de Rusia han lanzado este jueves de madrugada una nueva batería de misiles sobre distintas zonas de Ucrania, entre ellos un misil balístico intercontinental con el que buscaban atacar infraestructuras críticas y empresas de la ciudad de Dnipró, situada en el este del país.

La Fuerza Aérea ucraniana ha confirmado el lanzamiento de un misil balístico intercontinental desde la región rusa de Astracán y otros siete proyectiles de crucero sobre Dnipró. Según el balance oficial los sistemas de defensa de Ucrania lograron derribar seis de estos últimos misiles.

El gobernador regional, Sergei Lisak, ha confirmado daños en edificios civiles, entre ellos un centro que atiende a personas con discapacidad y varias empresas. Al menos dos personas han resultado heridas por los ataques, ha denunciado en su cuenta de Telegram.

Según el Estado Mayor de Ucrania, sólo el miércoles las fuerzas rusas lanzaron más de 80 ataques aéreos, si bien los disparos de artillería superaron los 4.000 y se registraron cerca de 1.400 drones kamikaze. En tierra, la mayor parte de las escaramuzas se concentran en la zona de Pokrovsk, situada en la región de Donetsk. 

Esta nota habla de:
Últimas noticias de Rusia
PARA LEER

Última hora: tras un sismo de 8,8, el volcán Klyuchevskoï entra en erupción

Última hora: tras un sismo de 8,8, el volcán Klyuchevskoï entra en erupción
En la península de Kamchatka, en el extremo oriente ruso, el volcán Klyuchevskoï entró en erupción pocas horas después de que un terremoto de magnitud 8,8 sacudiera la región. La localidad más cercana, Klyuchi, se encuentra a tan solo 30 kilómetros del cráter, mientras que Ust-Kamchatsk está a unos 50 km. Las autoridades monitorean la actividad sísmica y volcánica, y se teme que las columnas de ceniza puedan afectar la calidad del aire y obligar al cierre de escuelas, como ocurrió en eventos anteriores.