La ONG Greenpeace manifestó su "extrema preocupación" ante el anuncio de un nuevo intento de modificación de la Ley de Glaciares. Según la organización, la reforma permitiría intervenir en zonas actualmente protegidas, incrementando el riesgo de daño, contaminación y pérdida de los glaciares. La especialista Agostina Rossi Serra advirtió que el cambio implicaría "entregar las fuentes de agua de los argentinos" y contradecir los compromisos climáticos asumidos por el país.