“No podemos comprender que salió a divertirse y no volvió más”
La lluvia no impidió que se pinte la estrella amarilla en memoria de Lourdes Ferrando, la periodista que murió al ser atropellada. Elena, su madre dijo que “Ojalá se puedan evitar muertes como la de mi hija, porque la justicia no hace nada”.
Cerca de las 15:00 horas de ayer familiares, amigos, colegas y miembros de Estrellas Amarillas, recordaron a Lourdes Ferrando en el lugar donde fue atropellada y al cumplirse 5 años de su muerte.
Bajo una lluvia intermitente que no impidió que se realice el homenaje se pintó la estrella amarilla que recuerda a una nueva víctima de tránsito.
Elena, madre de la joven periodista, agradeció a los presentes por el acompañamiento y visiblemente dolida mencionó que “luchamos para tener otra respuesta, fuimos para que nos escuchen, pero la justicia es sorda y muda”.
Con respecto a quién conducía el vehículo que atropello al grupo de jóvenes esa madrugada, Marcos Soto, luego condenado, manifestó “tienen derecho el asesino y las víctimas son culpables, él tiene derecho a apelar y nosotros no, este señor vive disfrutando su vida y nosotros hechos pelota”.
“Ojalá se puedan evitar muertes como la de mi hija, porque la justicia no hace nada, la ley es injusta, luchamos con garra y hasta acá podemos llegar”. “Ahora esperamos lo que diga la Cámara, porque ellos tuvieron el tupe de pedir casación, ¿para que para alargar esto?”
“Yo quería que el vaya preso para que experimente lo que es estar lejos de sus seres queridos como nosotros sin Lourdes”, dijo Elena.
Lourdes Ferrando era periodista del diario La Opinión Austral y esa noche había salido a divertirse con amigos a un local nocturno. Había llovido mucho y las veredas estaban inundadas por lo que con su grupo de amigos tuvieron que caminar sobre la calle, cerca del cordón de la vereda.
Según se ventiló en el juicio, Marcos Soto, un trabajador del Consejo Provincial de Educación y, paradójicamente, de otro medio local, salía en estado de ebriedad y atropelló al grupo.
Producto del impactó muchos quedaron lesionados, pero fue la trabajadora de prensa quién lamentablemente perdió su joven vida.
Ya en mayo del 2018 la causa llegó a juicio. Tras varios debates, testimonios de víctimas y testigos y de los peritos, el Tribunal condenó a Marcos Soto a 3 años de prisión en suspenso y la inhabilitación por 10 años de conducir. Pena que dejó sabor a poco a la familia.