"Si se aplicara la Ley Nacional 27.130 las tasas de suicidio disminuirían"
Así lo manifestó, a Radio Nuevo Día, el psicólogo entrerriano Sergio Brodsky, quien es especialista en suicidio adolescente. La dicha ley nacional no se aplica plenamente en varias provincias, entre ellas Santa Cruz.
Durante esta jornada el licenciado Sergio Brodski, psicólogo especialista en suicidio adolescente habló con Radio Nuevo Día acerca de la problemática.
"Es una situación que atañe a todo el país. Es un problema que se ha universalizado y sin lugar a dudas se incremente en momentos de crisis, social, económica o cultural", manifestó y dijo: “Me parece muy importante hablar del tema porque es un tabú, algo de los que la gente no quiere hablar pero el único modo de resolver un problema es cuando se puede hablar, ningún problema que se oculta puede ser resuelto”.
"En los medios tiene que hablar de una manera positiva, que permita explicar el fenómeno y saber que el suicidio es un hecho que se puede prevenir y que todos podemos aportar en esta prevención", agregó.
"El suicidio se puede prevenir, no es un acto impulsivo o imprevisible sino que es la acción final de un proceso que va dando señales de advertencia que nos permite actuar e intervenir para
evitarlo", explicó, diciendo que este hecho no obedece a una sola causa y que hay muchos mitos al respecto.
Ley Nacional de Prevención
Sobre la Ley Nacional 27130 (a la que Santa Cruz adhirió pero no pone en práctica) , señaló que "es una muy buena ley que apunta a la prevención del suicidio y a la generación de estrategia para realizar un abordaje comunitario". Manifestó que la ley busca armar redes de prevención pero "eso hoy por hoy no existe como política pública". "Es uno de los factores que puede hacer crecer o disminuir las tasas de suicidios; las políticas públicas. SI se aplicará la ley disminuirían porque apunta a la capacitación de todas las instituciones para prevenir".
Acompañar a los jóvenes
"Una de las edades que ha crecido en estos hechos son los adolecentes y la juventud", indicó. "Hay que acompañarlos fuertemente y trabajar en la escuela para que los adolecentes acompañen y contengan. Los adultos tenemos que repensarnos en cómo los estamos acompañando y qué realidades estamos brindando. Que la gente se pregunte qué es lo que está pasando, más allá de lo dramático y doloroso de la situación es sumamente importante, porque esto se empieza a resolver cuando una sociedad se lo pregunta y empieza a buscar soluciones".
"Hay que alentar a los jóvenes a que puedan hablar y poner en palabras en lo que les sucede. No tiene que encerrarse en sus problemas con cuestiones que no pueden resolver. Hay que alentarlos a que puedan buscar ayuda", manifestó.
(El Diario Nuevo Día)