Beatriz Sica: la maltratadora de personal
Nuevo Día tuvo acceso a testimonios de ex trabajadores de Cultura, quienes aseveran las maneras autoritarias de trabajo que posee la actual secretaria de Cultura de la Provincia, quien se encargó de politizar el sector, amontonando gente de "La Cámpora" antes que priorizar a las personas estrictamente idoneas en la materia.
Sin dudas, si hay una materia pendiente con la que el Gobierno debería rectificarse es el sector de la cultura en la provincia. Lugar que acarrea pocos votos para la mayoría de los funcionarios, que sólo piensan en el arrastre electoral.
Actualmente, la cultura oficial en santa Cruz parece no interesarle a nadie, pero no sólo esto, sino que la flamante Secrearia Beatriz Sica se ha encargado de alejar a los trabajadores con experiencia y años en la materia para politizar el sector. Sin embargo, al parecer, tampoco le ha ido bien con sus propios compañeros a los que ella misma eligió.
No es novedoso que a Perlata no le interese la cultura en lo que se refiere a la parte artística de esta, situación que en general eleva el sentido crítico de los ciudadanos. Prueba es, en principio, que el edificio casi nuevo del Complejo Cultural se viene abajo y nadie hace nada por sostenerlo. También es prueba de esto la pobreza en cantidad de actividades culturales y artísticas que allí se realizan y que vienen disminuyendo desde el ex ministro de Gobierno Carlos Barreto hasta ahora.
Lo cierto es que preocupa que una mujer de la cultura tenga esta relación con los propios trabajadores. Nuevo Día accedió a testimonios de ex trabajadores que contaron como la funcionaria mostró la hilacha apenas entró en el cargo, y comenzó a maltratar a los trabajadores del lugar.
Al parecer, a la camporista no le gusta estar a la altura de sus "subordinados" y se encargó continuamente de mostrar su poder por sobre su gestión. Varios trabajadors del lugar emigraron de Cultura por los malos tratos de Sica, quien atrajo a jóvenes vinculados a la Cámpora.
La cultura sigue siendo materia pendiente en la provincia y también se exige en este sector mas que en ningún otro, una persona desligada de la política oficial o por lo menos que no priorice esto antes que lo estrictamente artístico.