Todos contra el gobernador
Luego de la crisis institucional y política que vivió la provincia de Santa Cruz a fines de 2011, Daniel Peralta se encuentra en el ojo de la tormenta, donde todo parece calmo, aunque no lo sea.
La calma que atraviesa Santa Cruz y el gobierno de Daniel Peralta, luego de la crisis que vivió la provincia a fines de 2011, no es la misma que se percibe en el ámbito político local, ya que, como bomba de tiempo, se presiente que las repercusiones del estallido social pueden volver a las calles de Río Gallegos, poniendo en jaque la gobernabilidad del propio mandatario.
Diferentes voces, a favor y en contra del gobierno, destacaron cuáles son los aspectos que debe cambiar Peralta para superar el traspié e impedir que su mandato se derrumbe cual castillo de naipes.
El referente de la Unión Cívica Radical (UCR) de la provincia y ex diputado provincial Omar Hallar cuestionó que Peralta tenga la voluntad política para sobreponerse a lo que sucedió en diciembre, y destacó: “Va a tener que hacer cambios estructurales en su gobierno y en la forma en que se manejó todo este tiempo. Ante cualquier problema que tenía, recurría a fondos como los 600 millones de dólares que tenía depositados en el exterior, que los derrochó en gastos corrientes y elevó los gastos de la administración pública sin tener ningún tipo de contemplación; entonces, se le acabó la billetera para hacer eso”.
Para que la situación que atraviesa la provincia tenga un punto superador, Hallar indicó: “Va a tener que cambiar actitudes; por ejemplo, va a tener que cobrar a las mineras lo que corresponde, y no el uno por ciento, como lo viene haciendo; de esa forma obtendrá fondos para llevar adelante el gobierno”.
A pesar del receso estival de la administración pública, el mandatario volvió a realizar modificaciones en su entorno.
Tal es así, que después de reemplazar a los funcionarios disidentes tomó juramento a nuevos subsecretarios en su gabinete. Asumieron Ana Elisa Medina, que trabajará en el área de Cultura; Andrea Millapel, como subsecretaria de Gobierno; Rubén Masa, como subsecretario del Interior; el doctor Daniel Tomás Santiago, en la subsecretaría de Servicio de Salud; y el licenciado Darío Eduardo Galindo, en la subsecretaría de Salud Colectiva.
Mediante sucesivos conflictos, siempre se sospechó que el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner le quitó respaldo a Peralta. Tal es así, que diferentes voces (dispares de pensamiento ideológico político) se manifestaron al respecto. La senadora nacional María Ester Labado (FpV), consultada por La Tecla Patagonia, respondió: “Puede ser que le haya soltado la mano a Peralta, pero no a Santa Cruz”. Por su parte, la diputada Elsa Alvarez señaló: “Esta provincia viene siendo gobernada desde hace veinte años por el kirchnerismo, quiere decirte que ellos están en claro conocimiento de cuál es la situación”.
Amigos son los amigos
A pesar de todo, y con un gobierno al borde del abismo, Peralta recibió el apoyo incondicional de los intendentes, quienes aseguraron que “trabajar por los grandes desafíos del pueblo” implica “la responsabilidad de llevar adelante medidas para hacer frente a la situación coyuntural y estructural” por la que atraviesa la economía provincial.
Los jefes comunales santacruceños mantienen contacto permanente con el gobernador y analizan la crítica situación de la provincia. En tanto que Peralta quiere conocer la situación de cada municipio. Asimismo respaldaron los cambios en el sistema jubilatorio, para “asegurar la continuidad y sustentabilidad” del mismo. Otra voz a favor de esta reforma fue la de la senadora Labado, quien expresó: “Es necesario hacer la modificación de la ley de Previsión Social, porque hay una ley de privilegio con el tema de las jubilaciones”. (Fuente: La Tecla).