Chacra Don Pino: la experiencia agroecológica que crece en Río Gallegos
Mónica Ruiz, referente de Chacra Don Pino en Río Gallegos, dialogó con el programa Rock and Frío sobre la producción agroecológica que lleva adelante junto a su familia. Desde huevos frescos hasta verduras de estación, el emprendimiento se posiciona como una alternativa sustentable en la ciudad. Además, expresó su preocupación por el cierre de la Agencia del INTA y su impacto en la soberanía alimentaria.
En una charla íntima con Rock and Frío, el programa que conduce Javier Seveso por Radio Nuevo Día, Mónica Ruiz compartió la historia y el presente de Chacra Don Pino, una de las chacras familiares más activas en la producción agroecológica de Río Gallegos. El proyecto nació como un homenaje a su suegro, Don Pino Di Érico, y hoy se consolida como un espacio de producción regional, educativa y solidaria.
"Trabajamos para la soberanía alimentaria, no como un concepto de moda, sino como una necesidad real", expresó Ruiz, quien junto a su marido impulsa la producción de huevos frescos y una amplia variedad de verduras, desde zanahorias hasta rúcula y kale, un superalimento poco conocido en la región. "Un huevo de chacra no es igual al del supermercado. Es fresco, directo del nido, y ofrecemos variedad de tamaños a precios accesibles", señaló.
Además de la actividad avícola, Chacra Don Pino participa en la Asociación de Productores, donde comercializa plantines, verduras de estación, mermeladas y compotas. "Queremos que la gente también produzca. En agosto llevamos plantines para que cada uno pueda empezar su huerta. Alimentarse sano también es quererse", explicó Ruiz. También destacó la importancia del acompañamiento de profesionales como la nutricionista holística Cristel Cruz, con quien articula recomendaciones alimentarias.
Mónica fue clara sobre los desafíos actuales: "Por el frío, baja la postura de las gallinas y cuesta más producir. Por eso estamos incorporando nuevas pollitas y organizando la próxima temporada con frutillas y tomate en invernadero". Durante los meses de invierno, explicó, "me guardo como la tierra. Descanso para volver con todo".
Sobre el final de la entrevista, se refirió al reciente cierre de la Agencia Experimental del INTA, una medida que consideró "un golpe duro" para los pequeños productores. "He trabajado codo a codo con ellos. No se dan cuenta del daño que están haciendo. El INTA no es una oficina más, es una herramienta vital para la sociedad. Mi solidaridad con sus trabajadores, especialmente los de Río Gallegos", afirmó.
Chacra Don Pino no solo produce, sino que educa, integra y promueve una forma de vida más consciente y sustentable. En cada maple de huevos, en cada mermelada de ruibarbo, hay un mensaje: volver a la tierra, volver a lo esencial. (Diario Nuevo Día)