Cristóbal López busca volver al negocio del juego y recuperar sus acciones en Casino Club: qué pasará con el de Río Gallegos
Nueve años después de su retiro, el empresario patagónico intenta volver al sector del juego. En Santa Cruz mantiene salas de Casino Club, pero su regreso dependerá de sus causas judiciales.
Nueve años después de anunciar su salida del negocio de las apuestas, el empresario Cristóbal López quiere volver a ser el "zar del juego". Así lo manifestó a su histórico socio, Ricardo Benedicto, con quien compartió la propiedad de Casino Club e Inverclub, compañías con fuerte presencia en Santa Cruz, Chubut y otras provincias del país.
"López quiere volver y así se lo dijo a Benedicto, pero por ahora no es posible por todos los frentes abiertos que tiene", indicó una fuente cercana. Desde el entorno del empresario aseguran que su prioridad es resolver las causas judiciales que aún enfrenta antes de retomar el control accionario de sus compañías.
Santa Cruz, uno de los bastiones de su antiguo imperio
Casino Club, que López fundó en los años 90 y expandió desde Comodoro Rivadavia hasta Río Gallegos, controla hoy más de 20 salas de juego en Misiones, La Pampa, Chubut y Santa Cruz. La empresa fue un emblema de la expansión del grupo Indalo y generó cientos de empleos en la Patagonia.
Aunque el empresario asegura que no volverá "por ahora" al negocio del juego, su entorno no descarta que busque recuperar participación hacia 2027, una vez resueltos los expedientes judiciales. "Cristóbal siempre quiso dar vuelta la operación. Pero hoy no puede ejecutar la cláusula de revocación y queda mucho por resolver", explicó otra fuente al tanto de las negociaciones.
En 2016, López vendió su parte a Benedicto por 61 millones de dólares. El acuerdo incluía un plan de pagos que se extendió hasta 2030, y que todavía continúa vigente. Sin embargo, el empresario patagónico podría recuperar su porción si su exsocio incumple el esquema de pagos.
Causas judiciales y reconfiguración del Grupo Indalo
El regreso de López al sector depende también del desenlace del "caso Oil", una causa en la que se lo acusa, junto a Fabián de Sousa, de presunta apropiación indebida de fondos públicos. Aunque ambos fueron absueltos en 2021, la Corte Suprema revocó ese fallo en mayo de 2024, lo que obliga a dictar una nueva sentencia.
Mientras tanto, el Grupo Indalo busca recomponerse. En los últimos meses sumó a Marcelo D'Alessandro, exministro de Seguridad porteño, como encargado de "relaciones institucionales". "Vino para tratar con la Justicia", aseguró uno de los hombres de confianza de López.
Ambos empresarios también ofrecieron en la causa Cuadernos pagar una "reparación integral del daño" de unos 680.000 dólares a cambio de su sobreseimiento, propuesta que fue rechazada por el tribunal oral.
"Cristóbal quiere redimirse. Está convencido de que puede volver al juego si logra cerrar sus causas y recuperar su imagen pública", remató un allegado.
Con información de La Nación

