En 48 horas hubo un sismo leve en Santa Cruz y uno de mayor intensidad en la Antártida sin causar daños

El Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) informó que el miércoles 20 de agosto a las 17:02 se registró un sismo de magnitud 3.0 en la localidad de Río Turbio, Santa Cruz.

El epicentro se ubicó a 7 kilómetros al norte de la ciudad minera, a 127 km de El Calafate y a 208 km al noroeste de Punta Arenas, con una profundidad de 30 km. No se reportaron daños en viviendas ni infraestructura, aunque algunos vecinos señalaron haber sentido el movimiento.

El fuerte movimiento en la Antártida

Apenas dos días más tarde, en la madrugada del viernes 22, la tierra volvió a moverse en el extremo sur del continente. Según el Centro Sismológico Nacional de Chile, un sismo de magnitud 7.6 se registró a 259 km al noroeste de la Base Frei, en el Territorio Antártico Chileno.

El SHOA activó en primera instancia una alerta preventiva de tsunami, pero luego confirmó que la propagación de las ondas no representaba peligro para las costas. "Se cancela el estado de amenaza de tsunami", indicó en su Boletín N°4.

Balance sin daños y con alerta preventiva

En el caso del sismo en la Antártida, el SENAPRED activó el Sistema de Alerta de Emergencia (SAE) para facilitar evacuaciones preventivas en Cabo de Hornos y la región antártica, aunque finalmente no se registraron afectaciones a personas ni daños a infraestructura crítica.

Ambos episodios ocurrieron en menos de 48 horas en la zona austral, recordando la actividad sísmica constante en la región. Especialistas remarcan que la magnitud de los movimientos fue muy distinta, pero en ninguno de los casos hubo consecuencias graves.