Gustavo López, el músico que sembró arte en la Patagonia, falleció a los 55 años
Gustavo López, reconocido docente, músico y referente cultural de Río Gallegos y Comandante Luis Piedra Buena, falleció recientemente, generando una profunda conmoción en la comunidad educativa y artística de la provincia. Fue un impulsor de proyectos artísticos, teatrales y musicales que dejaron huella en varias generaciones de estudiantes y colegas.
El ambiente artístico y educativo de la región está de luto por el fallecimiento de Gustavo López, un docente y músico profundamente querido en Río Gallegos y Comandante Luis Piedra Buena. López fue profesor de música en distintos niveles educativos y supo destacarse por su cercanía con sus alumnos, su creatividad y su incansable impulso por acercar el arte a la comunidad.
"Profe de música en mi secundaria, disfruté de sus ideas y espectáculos, compartí como colega. Una persona que invitaba a acercarte al arte. Con talento y empuje llevó adelante proyectos que hoy son marca en Piedra Buena", escribió en sus redes sociales Elizabeth Villarroel, docente y compañera del profesor fallecido. En su despedida, destacó no solo su capacidad para soñar, sino también su habilidad para concretar propuestas culturales.
López fue un formador incansable, generando espacios de encuentro a través de la música, el teatro y la poesía. En cada rincón donde trabajó, dejó una huella imborrable. "Te voy a extrañar inmensamente. Que descanses en paz, Gustavo López. Les pido para mi amigo que envíen mucha luz. Que llegue con su camino iluminado", publicó la docente y actriz Nora Consiglio, recordándolo como un ser lleno de vida y luz.
Su paso por la docencia no fue solo una profesión, sino una verdadera vocación. En cada taller, cada escenario y cada clase, supo despertar en otros la pasión por el arte. En una imagen compartida por la profesora María Gloria Villar, quien también lo despidió con afecto, se lo ve compartiendo un café en Necochea en enero de 2023. "Fue lindo encontrarte en Neco y charlar de estas tierras sureñas donde desparramaste música, poesía, teatro y docencia", expresó.
López fue mucho más que un profesor: fue un creador, un sembrador de sensibilidad, un hacedor de cultura. Su ausencia deja un vacío inmenso, pero su legado perdurará en los cientos de estudiantes y colegas que tuvieron la fortuna de cruzarse en su camino.
La comunidad educativa y cultural acompaña a su familia y seres queridos en este difícil momento. Que su obra y su espíritu sigan inspirando a quienes apuestan por un mundo con más arte y más humanidad.
(Fuente: El Diario Nuevo Día)