La imagen de la Virgen que estuvo en Malvinas recorre ciudades santacruceñas
La recientemente recuperada escultura de la Virgen de Luján, a la que miles de soldados que lucharon en las Islas Malvinas la tomaron como su protectora y que desde hacía 37 años se hallaba en un obispado de Gran Bretaña, ya recorre ciudades de Santa Cruz. El sábado llega a Río Gallegos.
La imagen religiosa, de no más de 40 centímetros de altura, arribó custodiada por efectivos de la Sección Pico Truncado de Gendarmería Nacional. En la explanada la esperaba un centenar de personas, entre ellos veteranos de guerra de esta ciudad, Luis Maza y Sergio Ferreyra, junto con el comodorense Jorge Palacios.
Este último salvó milagrosamente su vida cuando en la madrugada del 4 de mayo de 1982 su pozo de zorro cavado en el entorno del aeropuerto de Puerto Argentino quedó sepultado de tierra por el bombardeo de uno de los aviones Vulcan de los ingleses. Se aferró a Dios y a la Virgen de Lujan para sobrevivir, hasta que fue auxiliado por sus compañeros.
La escultura había sido donada por una familia santacruceña y llegó a Malvinas pocos días después de la recuperación de las islas, acompañando a los soldados del Regimiento de Infantería 25 de Sarmiento, estando presente en las misas de campaña que oficiaba el capellán Vicente Martínez.
Al finalizar el conflicto bélico quedó en el interior de la iglesia Saint Mary, ubicada en Avenida de las Rosas (Ross Road) de Puerto Argentino y los soldados británicos se la llevaron para depositarla en la sede del obispado de la ciudad de Aldershot (condado de Hampshire), al norte de Londres.
Luego de muchos años se supo de su destino y se hicieron múltiples gestiones para su restitución, algo que finalmente se logró a fines de octubre de este año y su devolución se concretó en Roma, donde fue bendecida por el Papa Francisco.
A cambio de ello, a los veteranos de guerra ingleses se les entregó una réplica de esta Virgen que es considerada como patrona de los pueblos de Argentina, Paraguay y Uruguay.
PROHIBIDO OLVIDAR
La posibilidad de que la imagen religiosa pudiera recorrer localidades santacruceñas se concretó por las gestiones de integrantes del Proyecto Prohibido Olvidar que surgió a iniciativa de alumnos y docentes de la Escuela N° 3 “Malvinas Argentinas” de Caleta Olivia.
Ellos estaban también en la plaza ubicada en el barrio Parque, al igual que personal de la Prefectura local, liderados por su jefe, Ariel Mongiat, además de vecinos en general, gran parte de ellos referentes de distintas parroquias.
Antes de que se ponga el sol se escucharon las estrofas del Himno Nacional y un trompetista ejecutó las notas que representan el minuto de silencio en honor a los soldados argentinos muertos en combate durante el cruento conflicto bélico de 1982.
La misa fue oficiada por el diácono Mario Sosa y el párroco Humberto Ramírez, quien en su homilía dijo que la Virgen de Luján sigue protegiendo el alma de los soldados que quedaron en el archipiélago y resaltó además que Dios hizo posible que la escultura volviera a la Argentina poco antes de que se rememore el nacimiento de Jesús. (Fuente: Diario El Patagónico)