Juliana presentó sus creaciones en la Fiesta del Poncho: "Me voy con el corazón inflado de amor"
Juliana, cordobesa de nacimiento pero vecina de Río Gallegos hace ocho años, participó con su marca Sílice Joyas en la Fiesta Nacional del Poncho en Catamarca. Desde el predio ferial, habló con Javier Seveso en el programa "Rock and Frío" de Radio Nuevo Día sobre la historia de su emprendimiento, el componente holístico de sus creaciones, y el profundo vínculo espiritual que establece con cada diseño.
Juliana, cordobesa de nacimiento pero vecina de Río Gallegos hace ocho años, participó con su marca Sílice Joyas en la Fiesta Nacional del Poncho en Catamarca. Desde el predio ferial, habló con Javier Seveso en el programa "Rock and Frío" de Radio Nuevo Día sobre la historia de su emprendimiento, el componente holístico de sus creaciones, y el profundo vínculo espiritual que establece con cada diseño.
Una joya con alma: la historia de Sílice y su creadora
Desde una piedra en el suelo catamarqueño hasta un taller en el Polo Emprendedor de Río Gallegos, la historia de Juliana y su emprendimiento Sílice Joyas es un recorrido de sensibilidad, intuición y arte. En diálogo con "Rock and Frío", Juliana relató cómo nació la marca en 2007, inspirada en el silicio, uno de los elementos más presentes en la Tierra: "Estamos hechos de sílice, y eso es lo que queremos transmitir en cada joya: una parte de nuestra alma".
La diseñadora reveló que su primer contacto profundo con una piedra fue con una turquesa egipcia hace 25 años, lo que significó una iniciación espiritual que la guiaría hasta el presente. Hoy, cada una de sus piezas se diseña a partir de una conexión personalizada con el cliente y con las energías que la piedra representa. "Cada diseño es un amuleto, algo que acompaña al otro en su proceso vital", explicó.
Entre piedras, emociones y diseño personalizado
Más allá de su propuesta estética, Juliana lleva adelante una visión holística que incorpora su formación en astrología y su intuición creativa. "Las piedras nos aportan según nuestro proceso espiritual, emocional y físico. Hay un lenguaje simbólico que se manifiesta en la joya", explicó.
Desde el taller ubicado en el Polo Emprendedor de Río Gallegos, Juliana no solo crea joyas, también escucha, aconseja y acompaña: "Nos encanta cuando alguien se anima a diseñar su propia joya con intención". En ese local, además de ver el proceso en vivo, se pueden recibir asesoramientos personalizados que combinan lo artesanal con lo espiritual.
Las piedras, explicó, provienen de diversas partes del mundo: Brasil, India, África, Rusia y también de nuestro país. "A veces las consigo viajando y otras a través de proveedores que las importan", contó.
Catamarca: reencuentros, emociones y sueños por venir
La participación en la Fiesta Nacional del Poncho, uno de los eventos más emblemáticos del país, fue un momento bisagra para Juliana. "Volví después de 17 años y me reencontré con el lugar donde nació Sílice", dijo emocionada. El viaje también tuvo un componente personal: su hija vive en Catamarca, y fue ella quien motivó el regreso.
"La respuesta del público fue maravillosa. Sentí una conexión genuina. Me voy con el corazón inflado", aseguró. Y aunque ya tiene un espacio consolidado en Río Gallegos, Juliana sueña en grande: "Me imagino con locales en otras provincias y transmitiendo todo esto a más personas".
Antes de despedirse, dejó un mensaje para quienes visitan su local o simplemente se cruzan con su historia: "Disfruten la vida, hoy es hoy y mañana no sabemos". (Diario Nuevo Día)