"La Iglesia lo encubre desde hace años": la Red de Sobrevivientes alerta por un sacerdote con denuncias de abuso en Río Gallegos
Matías Montes, integrante de la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos de Argentina, confirmó que José Carlos Jorge Aguilera Tassin fue identificado en una institución educativa de Río Gallegos, a pesar de contar con antecedentes por abuso sexual infantil. La Red lanzó una alerta pública para que las familias estén atentas y exijan explicaciones a las autoridades escolares. El sacerdote ya había sido denunciado y apartado por la Iglesia, pero volvió a realizar actividades con menores.
La presencia del sacerdote José Carlos Jorge Aguilera Tassin en un colegio de Río Gallegos generó alarma entre familias y organizaciones que luchan contra los abusos dentro de la Iglesia. Matías Montes, representante de la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos, explicó en el programa "Fuera de Contexto" de Radio Nuevo Día que la alerta busca advertir a la comunidad sobre los antecedentes del religioso y evitar nuevas víctimas. Aguilera, oriundo de Salta, fue sobreseído judicialmente por prescripción, pero carga con múltiples denuncias por abuso sexual infantil, incluyendo casos dentro de su familia.
Según Montes, la Red mantiene una base de datos con nombres de sacerdotes denunciados o condenados, y fue a través de un mensaje recibido por redes sociales que tomaron conocimiento de su aparición en el Colegio de Fátima de las hermanas Clarisas Franciscanas. Allí, Aguilera habría dado una misa y una charla sobre la familia, pese a que se le había impuesto la prohibición de tener contacto con menores. "El que abusa una vez, abusa dos y abusa siempre", advirtió Montes, quien además criticó que el sacerdote haya sido trasladado al sur del país por las mismas religiosas que ya lo conocían de su paso por Salta.
"El modus operandi de la Iglesia es siempre el mismo: cambiar de parroquia, de diócesis, e incluso de país a los sacerdotes denunciados", remarcó el referente de la Red. También denunció que Aguilera continúa recibiendo dinero por sus actividades, financiado por familias que confían en la institución educativa. "El arzobispado le impuso restricciones, pero sigue en contacto con menores. Eso es inaceptable", agregó.
Montes instó a los padres a exigir explicaciones a las autoridades del colegio y a denunciar ante la justicia civil, no ante instancias eclesiásticas, para evitar la revictimización. "La Iglesia sigue encubriendo a estos curas, como lo hizo históricamente. Y mientras tanto, la gente de fe sigue siendo defraudada", concluyó. La Red de Sobrevivientes pide que se extremen los cuidados y se mantenga la vigilancia sobre actividades de este tipo para prevenir futuros abusos.