Nadar frente al glaciar: La historia de Maru Girelli quien participa del Winter Swimming
Maru Girelli, nadadora de aguas frías oriunda de Mendoza y radicada en Río Gallegos, será una de las representantes argentinas en la Winter Swimming World Cup que se desarrolla del 4 al 10 de agosto en el Lago Argentino, frente al imponente glaciar Perito Moreno. En una charla íntima con "Rock and Frío", compartió su historia, su entrenamiento sin neopreno y las emociones únicas de nadar entre témpanos, destacando la fuerza mental, la comunidad de apoyo y el amor por un deporte extremo que gana adeptos en Santa Cruz.
Maru Girelli, nadadora de aguas frías oriunda de Mendoza y radicada en Río Gallegos, será una de las representantes argentinas en la Winter Swimming World Cup que se desarrolla del 4 al 10 de agosto en el Lago Argentino, frente al imponente glaciar Perito Moreno.
De Mendoza a Río Gallegos: un giro hacia lo extremo
Maru Girelli no nació entre hielos, pero el frío terminó abrazándola. Aunque su primer deporte fue el tenis, una lesión la devolvió al agua. "Me enamoré del agua fría", relata desde Río Gallegos, ciudad en la que vive hace 24 años. Allí, junto a entrenadores como Alejandro Muchastegui y Matías Ola, comenzó un recorrido que la llevó a cruzar la Ría local, el Canal de Beagle y ahora, a prepararse para competir en el Winter Swimming World Cup, uno de los eventos más extremos del mundo, sin traje de neopreno.
Entrenar con el cuerpo, resistir con la mente
El agua a 2°C no se desafía sin preparación. "Primero fueron tres minutos, después cinco... hasta que llegué a nadar 20 minutos", explica Maru sobre su progresión. Bajo la supervisión de su entrenador de aguas frías, Pablo Pera, y el grupo máster del Club Hispanoamericano, Girelli entrena cada día, sumando fuerza física y, sobre todo, mental. "Esto es 60% mental. Hay que estar convencida. Pero nunca se nada sola, siempre en comunidad", afirma.
En Calafate nadará cinco pruebas: 50 y 200 metros pecho, y 100, 200 y 500 metros libres, esta última considerada la más exigente. La aclimatación se hace en la ría o en la sede de los kayakistas locales, incluso bajo temperaturas bajo cero.
Nadar frente a un glaciar: entre emoción y respeto
Nada describe mejor lo que significa nadar frente al Perito Moreno que las palabras de Maru: "Uno entra ahí y no lo puede creer, es como estar dentro de un cuadro". El canal de los témpanos, las brazadas entre hielos flotantes y el viento patagónico son parte de un escenario que supera cualquier competencia.
En el agua, Maru piensa en su familia, en quienes la apoyan, y en lo afortunada que se siente. "Me olvido del frío, de todo. Sólo quiero disfrutar y llegar." No falta la hipotermia, ni el temblor post inmersión, pero lo maneja con técnica, abrigo inmediato y bebidas tibias.
Inspirar desde el frío
Maru también busca contagiar. "Cualquier persona lo puede hacer, con responsabilidad y progresión", asegura. Ya ha motivado a adultos, jóvenes y hasta a sus propias hijas, una de ellas nadadora y otra corredora, que también la asesoran en nutrición.
Además, este año se realizará una actividad de inmersión dirigida a personas que deseen probar el agua fría sin necesidad de competir. La idea: abrir la puerta a nuevos valientes que quieran entrar a este mundo.
Y si bien hoy Maru se dedica exclusivamente a nadar, no descarta en el futuro seguir colaborando en eventos o desde otros roles. "Me gustan los desafíos", dice con una sonrisa. De Mendoza a la Patagonia, del calor al hielo, Maru Girelli se convirtió en una referencia del nado extremo y en una embajadora del coraje santacruceño. (Fuente: El Diario Nuevo Día)