Su hija fue abusada en Santa Cruz y piden que esté preso el presunto autor: vigilia afuera de la casa del acusado y las pericias a la joven

La familia de la joven de Piedra Buena que denunció un hecho de abuso sexual ocurrido el sábado 6 de septiembre, entre las 6:00 y 6:30 horas, volvió a expresar su profundo dolor en un comunicado público en el que exigieron justicia y protección.

"Pedimos la inmediata detención del agresor sexual que aún permanece en libertad, poniendo en riesgo a toda la comunidad. Exigimos que se garantice la investigación, la condena y la detención del denunciado para que no haya más víctimas", señalaron los padres de la víctima.

Críticas al accionar estatal

En el escrito, la familia apuntó contra la policía y las autoridades judiciales por presuntas irregularidades en el procedimiento. Aseguraron que los efectivos no detuvieron al acusado pese a la denuncia inmediata, y cuestionaron la actitud de la Comisaría de la Mujer, que se negó a tomar la declaración de la joven cuando ya estaba en condiciones de hacerlo.

"Durante la asistencia médica y psicológica, personal policial irrumpió en la sala para pedir datos, sin respetar los protocolos en casos de abuso. Nuestra hija se encontraba en estado de shock y casi no podía hablar", remarcaron.

Finalmente, la denuncia fue tomada en la Fiscalía de Puerto Santa Cruz, donde solo se dictó una prohibición de acercamiento por diez días, medida que la familia consideró insuficiente e injusta.

"No vamos a bajar los brazos"

En diálogo con El Diario Nuevo Día, Celso, padre de la víctima, confirmó que se dictó una nueva perimetral y que la joven ahora vive con ellos. "La trajimos a nuestra casa, donde estamos nosotros", explicó.

Todas las noches, la familia realiza manifestaciones frente a la vivienda del acusado. "Lo vamos a seguir haciendo hasta que esté entre las rejas, como corresponde. No vamos a bajar los brazos", advirtió Celso.

La joven fue citada para mañana en el Juzgado de Puerto Santa Cruz, a cargo de la jueza María Rubini, donde deberá ratificar la denuncia y someterse a pericias psicológicas. "Vamos a seguir reclamando justicia porque hay un abusador libre, y hasta que no esté preso como corresponde, no vamos a parar", insistió el padre.

El caso

El sábado 6 de septiembre, tanto el padre y la madre (ambos policías) se enteraron del abuso cuando un móvil de la Policía les informó que su hija estaba en el hospital.

El viernes, su hija había salido a bailar con dos amigos. Al finalizar la noche, un hombre mayor de edad, desconocido para ellos, los invitó a su casa. Una vez dentro, encerró a los dos acompañantes de la chica y la llevó a ella bajo el pretexto de comprar bebidas. Los jóvenes la llamaron, el hombre le quitó el celular y les dijo, bajo pretexto de que era policía (lo cual es mentira) que no avisaran a los efectivos. Los chicos se escaparon, pero no la joven.

Fueron a radicar la denuncia en la Comisaria de la Mujer, en donde un efectivo en un primer momento no quiso aceptársela ya que debía presentar un certificado médico. Aunque secuestraron las prendas de la joven, no hubo ninguna medida investigativa en la casa del acusado.