Aníbal F. siguió profundizando la tensión entre el Gobierno y Lorenzetti por el rol de la Justicia
Dijo que el presidente de la Corte "ha concentrado la gestión del Poder Judicial". Le dio continuidad así al discurso de ayer de Cristina.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, dijo que
el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti,"ha
concentrado la función administrativa y la gestión del Poder Judicial".
En las declaraciones que formuló antes de
ingresar a Casa Rosada, el funcionario agregó que "si se analizan los
gestos" y las "actitudes" de Lorenzetti "se puede desprender que
él es así".
El funcionario le dio continuidad así a las
declaraciones que hizo ayerla presidenta Cristina Fernández de
Kirchnercontra las autoridades de la Corte Suprema de Justicia
al reclamarle que "en vez de dar tantos discursos contra el
narcotráfico", dote de mayores recursos a los juzgados. Esto luego de que
el titular del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti alertara que el contrabando
de drogas es "un flagelo preocupante".
La presidenta hizo estas referencias al
presentar en el partido bonaerense de San Martín "dos hornos pirolítico
móviles", destinados a la destrucción de droga incautada, la jefa de
Estado sostuvo que se trata de una "contribución para crear políticas de
Estado en materia de seguridad y lucha contra el narcotráfico".
La declaración de la Presidenta se produjo
luego de que Lorenzetti advirtiera que "la gente tiene razón al pensar que
la inseguridad se ha agravado" y alertó que "el narcotráfico también
es un flagelo preocupante, junto con la impunidad".
La pulseada entre el Gobierno y el Poder
Judicial tuvo ayer un nuevo capítulo, cuando la jefa de Estado precisó que el
juzgado federal de Orán sólo cuenta con 22 empleados, en una de las zonas más
críticas del tráfico de drogas.
"En lugar de dar tantos discursos contra
el narcotráfico, quienes son los máximos responsables del Poder Judicial,
deberían dotar de mayor cantidad de empleados, recursos y elementos para que
puedan hacerlo eficazmente", dijo la Presidenta en clara referencia a los
dichos de Lorenzetti.
Lo cierto es que el titular de la Corte abrió
la polémica cuando en una entrevista al diario La Voz del Interior de Córdoba
señaló que "cuando se habla de Justicia, siempre se apunta a la cuestión
penal y a la inseguridad" y explicó que "ese problema se debe
afrontar con políticas de Estado continuas de todos los poderes nacionales y
provinciales".
Pese a que Lorenzetti reconoció que "el
Poder Judicial debe hacer una autocrítica y tener otra actitud: ser más
receptivo de las demandas sociales", de poco sirvió para atemperar la
embestida de la Presidenta, que insistió que su Gobierno "no habla tanto
en los discursos".
Fue en el marco del acto en San Martín donde la
mandataria también anunció que enviará al Congreso un proyecto de ley para
reemplazar al Registro Nacional de Armas (Renar), al que tildó de "viejo y
obsoleto", por unaAgencia Nacional de Materiales
Controlados.
En este sentido sostuvo que su objetivo es que
"el desarme" se "convierta en una política pública de
Estado" y resaltó que en su administración "se han destruido más
armas que en ningún otro gobierno, vamos a llegar a las 300 mil armas
destruidas".
Durante el acto, la Presidenta también inauguró
por videoconferencia un laboratorio forense en Santiago del Estero y anunció
que se instalarán próximamente en las provincias que aún faltan.
Fue en ese tramo de su discurso que Cristina
Fernández expresó un reproche cuando mencionó que esos recursos del Gobierno
"deberían integrar inversiones del Poder Judicial".
"Pero las hacemos nosotros para contribuir
con la Justicia" y por eso "hemos inaugurado estos laboratorios muy
modernos" en distintas provincias, aseveró, ya que "antes no había
nada, absolutamente nada. Esto también es una contribución al tema de la lucha
por la seguridad y el narcotráfico", subrayó.
Lorenzetti indicó que la función de los jueces
"no" es gobernar, sino poner "límites al gobierno de turno"
y "al poder empresario".
Al ser consultado sobre el proceso de "democratización de la
Justicia", que propone el Ejecutivo, el titular de la Corte admitió que es
una "idea" que "nunca fue bien aclarada".
En cuanto a las presiones que ejerce el
Gobierno sobre el máximo tribunal, aclaró que "hay presiones de todos
lados", pero indicó que "eso no nos puede afectar como jueces".
"Si la Presidenta dice algo, que lo diga. Lo que no nos puede pasar, es
que esas opiniones nos afecten. Si un juez se siente presionado, se debe
retirar del cargo", remató el juez.