El abogado de Manzanares reveló que el ex contador de los Kirchner no quería ser excarcelado
El abogado de Víctor Manzanares, ex contador de Néstor y Cristina Kirchner, reveló que su cliente no quiso ser excarcelado durante su detención por las causas Hotesur y Los Sauces. Según explicó en diálogo con radio Rivadavia, Manzanares consideraba que debía "pagar su pena" pese a haber colaborado con la Justicia en la causa Cuadernos, donde fue un testigo clave.
El abogado Roberto Herrera relató que la decisión de Manzanares de convertirse en arrepentido fue un proceso largo. "Pidió nuestra asistencia y empezamos a evaluar esa posibilidad. En noviembre hubo un primer intento, donde ni Stornelli sabía la cantidad de información que tenía", explicó en radio Rivadavia, en el programa Esta Mañana.
El letrado indicó que el ex contador se presentó como "arrepentido colaborador" y que al poco tiempo fue trasladado, aportando información "muy importante y respaldada por documentación", gran parte de la cual "la Justicia no sabía que existía y pertenecía a Daniel Muñoz".
"Fue el contador de toda la vida de los Kirchner"
Herrera destacó que Manzanares fue "el contador de toda la vida" de Néstor y Cristina Kirchner, y que su testimonio fue esencial para comprender cómo se movían los fondos en el entramado económico del matrimonio.
"Explicó cómo eran los mecanismos para lavar dinero. Por eso se lo considera un arrepentido sincero: no lo hizo para sacar ventaja", afirmó el abogado.
El aporte del ex contador fue clave en la investigación conocida como los cuadernos de las coimas, en la que distintos empresarios y exfuncionarios admitieron haber participado de una red de sobornos durante los gobiernos kirchneristas.
"Tenía que pagar su culpa"
Uno de los aspectos más llamativos del testimonio del abogado fue la revelación de que Manzanares no quiso ser excarcelado. "Me decía que tenía que pagar su pena", señaló Herrera, quien recordó que su cliente estaba detenido en la causa Hotesur-Los Sauces "por mandar un mail".
El abogado insistió en que hubo "muchas falencias" en esa causa y que, pese a ello, Manzanares se resistía a pedir la libertad. "Es muy católico y sentía que debía asumir su culpa. Tenía una posición económica muy solvente antes de conocer a los Kirchner: sus padres eran millonarios de verdad, y él no tenía necesidad de involucrarse", reflexionó el letrado.
La figura de Manzanares sigue siendo relevante dentro de las causas por corrupción que involucraron a la familia Kirchner, tanto por su papel profesional como por las confesiones que ayudaron a avanzar en la investigación judicial.
