El Gobierno coordina el traslado de Matías Ozorio, ligado al triple crimen de Florencio Varela y mano derecha de "Pequeño J"
El Gobierno argentino coordina el traslado de Matías Ozorio, detenido en Perú y señalado como la mano derecha de "Pequeño J", líder del narcotráfico implicado en el triple crimen de Florencio Varela. Expulsado del país vecino, será entregado a la PSA en suelo argentino, en un operativo con participación de Interpol y la Policía bonaerense.
El Gobierno nacional avanza en el traslado de Matías Ozorio, detenido en Perú e identificado como la mano derecha de "Pequeño J", acusado por el triple crimen de Florencio Varela. El narcotraficante ya fue expulsado de Lima y regresará al país en un avión de la Fuerza Aérea Argentina.
Fuentes oficiales confirmaron que, una vez en territorio argentino, quedará bajo custodia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). En el procedimiento también intervienen Interpol y la Policía de la provincia de Buenos Aires.
En paralelo, el proceso de extradición de "Pequeño J" continúa en Perú y podría demorar hasta dos meses en concretarse.
La caída de Ozorio en Lima
Según relató el jefe de Inteligencia Antidrogas de Perú, Percy Pizarro, la detención de Ozorio fue clave para llegar a su jefe. "Cuando establecimos que Ozorio estaba en el país, identificamos que se comunicaba constantemente a la Argentina. Coordinó encontrarse con ‘Pequeño J' en Plaza Norte", explicó.
Ese centro comercial es uno de los más concurridos de Lima, lo que, según los investigadores, formaba parte de la estrategia de los narcos para pasar desapercibidos. Los equipos de inteligencia siguieron de cerca los movimientos de Ozorio hasta dar con él.
Una chalina que delató a un narco
La captura de Ozorio se concretó gracias a un detalle mínimo pero revelador. "Como no llevaba teléfono ni equipos tecnológicos, era difícil ubicarlo. Pero tenía puesta una chalina, algo que no es habitual por esta zona", contó Pizarro.
Ese rasgo distintivo permitió identificarlo entre la multitud y proceder a su arresto. Luego, la policía utilizó su propio celular para tender una trampa y engañar a "Pequeño J", quien se dirigía hacia Lima. Según la investigación, ambos planeaban viajar a Trujillo, donde contaban con apoyo familiar para ocultarse.
El operativo terminó frustrando esos planes y dejó bajo custodia a uno de los hombres más buscados por la justicia argentina.