El Tribunal Federal condenó a Sabag Montiel y Brenda Uliarte por el intento de asesinato a Cristina Kirchner

El Tribunal Oral Federal N°6 de Buenos Aires condenó este miércoles a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte por el fallido atentado en el que intentaron asesinar a Cristina Fernández de Kirchner, ocurrido en la puerta de su domicilio en el barrio porteño de Recoleta en 2022.

Sabag Montiel, el hombre que gatilló un arma a pocos centímetros de la cabeza de la entonces vicepresidenta, fue sentenciado a 10 años de prisión. Su expareja, Brenda Uliarte, considerada partícipe necesaria del plan criminal, recibió una condena de 8 años.

Por su parte, los jueces Ignacio Fornari, Sabrina Namer y Adrián Grünberg absolvieron a Nicolás Carrizo, señalado como "jefe de los copitos", tal como se preveía. La fiscal Gabriela Baigún y la querella habían retirado la acusación durante el debate al comprobarse que Carrizo no tuvo participación directa en el hecho.

Los argumentos y el cierre del juicio

Los fundamentos del fallo se darán a conocer el 9 de diciembre, según informó el Tribunal. Antes de la lectura del veredicto, los acusados tuvieron la oportunidad de pronunciar sus últimas palabras.

Sabag Montiel fue el primero en hablar e intentó establecer un paralelismo entre su caso y la muerte del fiscal Alberto Nisman, lo que motivó la intervención de la presidenta del Tribunal, Sabrina Namer, quien le pidió centrarse en lo ocurrido durante el juicio.

Durante su declaración, el acusado aseguró que "quieren matarlo" y que "le quieren tirar el muerto" al diputado del PRO Gerardo Milman, investigado por su presunta vinculación con la planificación del atentado. "Me parece una bajeza total cómo lo incriminaron", sostuvo.

También deslizó teorías sin sustento, entre ellas que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, habría pedido a Cristina Kirchner "garantizar" una supuesta extradición.

Uliarte en silencio y Carrizo absuelto

A diferencia de su expareja, Brenda Uliarte no hizo uso de la palabra. Pasó la última audiencia aislada del resto de los acusados, rodeada por un perímetro de agentes del Servicio Penitenciario Federal.

El absuelto Nicolás Carrizo, en tanto, expresó brevemente su pesar por los tres años que pasó detenido: "Siento esa impotencia por dentro por haber pasado preso estos tres años que nadie me los va a devolver. Me gustaría que esto no le pasara a nadie más", dijo ante el tribunal.