Embargos por deuda alimentaria: qué dice la ley y qué bienes están protegidos
En Argentina, ciertos bienes pueden embargarse por deuda alimentaria, aunque la ley protege otros para garantizar una vida digna al deudor.
En el sistema judicial argentino, el embargo es una herramienta para asegurar el cumplimiento de la cuota alimentaria. Si el deudor no paga, el juez puede autorizar la retención de bienes muebles e inmuebles, incluyendo propiedades, vehículos, electrodomésticos e incluso saldos en cuentas bancarias.
Sin embargo, el artículo 219 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación establece que ciertos bienes son inembargables: el dormitorio habitual del deudor y su familia, ropa y muebles indispensables, herramientas de trabajo y sepulcros. Estas excepciones buscan proteger un mínimo vital para la subsistencia.
Excepciones: cuando se pueden embargar bienes "protegidos"
En casos de deuda alimentaria, la ley otorga prioridad al derecho de los hijos y beneficiarios por encima de la protección patrimonial del deudor. Por eso, un juez puede autorizar el embargo de bienes que en otras circunstancias serían inembargables, si lo considera necesario para garantizar el bienestar de los menores.
"El carácter prioritario de la cuota alimentaria permite excepciones que no aplican en otras deudas", explican desde el ámbito judicial.
Obligaciones del progenitor afín y alimentos entre cónyuges
El progenitor afín, es decir, quien convive con el padre o madre del menor sin ser su progenitor biológico, puede asumir responsabilidades económicas de forma subsidiaria. Esto aplica especialmente si la convivencia es estable y la persona colabora en la manutención del niño. La obligación cesa al terminar la convivencia, aunque un juez puede fijar un plazo de pago si el menor resulta perjudicado.
En cuanto a los cónyuges o convivientes, la ley contempla que uno de ellos deba brindar alimentos al otro durante la unión o incluso separados de hecho. Esta obligación termina con el divorcio, salvo situaciones especiales, como enfermedad grave o falta total de recursos.(IProfesional)