Emergencia pediátrica sin efecto: el Gobierno refuerza fondos y beneficia al Garrahan
Aunque la Ley de Emergencia Pediátrica sigue suspendida, el Gobierno nacional decidió incrementar el presupuesto para hospitales y centros de salud de alta complejidad, incluyendo al Hospital Garrahan. La medida, formalizada mediante la decisión administrativa 29/2025, busca atender parcialmente las necesidades planteadas por el Congreso sin comprometer el equilibrio fiscal.
El Poder Ejecutivo resolvió no poner en marcha, por ahora, la Ley de Emergencia Pediátrica, bajo el argumento de evitar un impacto negativo en el superávit fiscal. Sin embargo, mediante la decisión administrativa 29/2025, publicada este viernes en el Boletín Oficial con la firma del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se dispuso un aumento del presupuesto destinado a hospitales y centros de salud de referencia, en especial aquellos vinculados a la atención pediátrica.
En el documento, el Ejecutivo señaló que, si bien la emergencia está suspendida hasta que el Congreso determine la fuente de financiamiento, existe "la voluntad de atender, dentro de las disponibilidades presupuestarias actuales, las necesidades tenidas en cuenta por el Congreso al sancionar la ley".
Hospitales beneficiados y reasignación de fondos
Entre los hospitales alcanzados por la medida se encuentran el Hospital de Pediatría S.A.M.I.C. "Profesor Dr. Juan Pedro Garrahan", el Hospital de Alta Complejidad "El Cruce - Dr. Néstor Carlos Kirchner", el Hospital de Alta Complejidad S.A.M.I.C. "El Calafate", el Hospital de Cuenca Alta Néstor Kirchner, el Hospital Dr. René Favaloro y el Hospital Presidente Néstor Kirchner.
También recibirán refuerzos presupuestarios el Hospital en Red Especializado en Salud Mental y Adicciones "Licenciada Laura Bonaparte", el Hospital Nacional "Dr. Baldomero Sommer", el Hospital Nacional "Profesor Alejandro A. Posadas", el Hospital Nacional y Comunidad "Dr. Ramón Carrillo" y el Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur "Dr. Juan Otimio Tesone".
Según la norma, los incrementos se compensarán con una reducción en los créditos asignados a la Jurisdicción 91 -Obligaciones a cargo del Tesoro-, afectando únicamente al área de salud, mientras que el resto de los sectores mantendrá los fondos del presupuesto prorrogado de 2023.
Una emergencia suspendida por costos
La Ley de Emergencia Pediátrica, promulgada en mayo y ratificada en agosto tras la caída del veto presidencial, ordenaba la asignación inmediata de fondos para hospitales pediátricos, recomposición salarial y actualización de los ingresos de los residentes.
No obstante, el Ejecutivo argumentó que la norma carece de fuente de financiamiento y que su aplicación implicaría un gasto de $196.270 millones, superando ampliamente la capacidad del Ministerio de Salud, que ya registra un déficit de $102.400 millones.
En los considerandos, el Gobierno advirtió que reasignar esa suma equivaldría a recortar el 30 % de los subsidios para medicamentos y tecnología sanitaria y el 60 % del presupuesto destinado a la prevención del VIH-Sida, algo que generó críticas de la comunidad médica y sindical, que respondió con un nuevo paro de 24 horas.

