Entre Ríos

Expulsan de Argentina a la exMiss Bolivia condenada por transportar 300 kilos de cocaína

La exMiss Bolivia Jade Isabela Callau Barriga fue condenada por la Justicia Federal argentina a tres años de prisión en suspenso y a pagar una multa de más de 2,7 millones de pesos tras ser hallada culpable de participar en el transporte de 300 kilos de cocaína. La mujer fue expulsada del país y deportada a Bolivia, donde arribó el domingo por la madrugada.

Redacción Nuevo Día
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La Justicia Federal argentina condenó a tres años de prisión en suspenso a Jade Isabela Callau Barriga, exMiss Bolivia, luego de hallarla responsable como partícipe secundaria en el transporte de más de 300 kilos de cocaína. El caso, ocurrido en la provincia de Entre Ríos, tuvo amplia repercusión tanto en Argentina como en Bolivia por la notoriedad de la acusada.

La jueza Mariela Rojas, del Tribunal Oral Federal de Concepción del Uruguay, fue quien dictó la sentencia en el marco de un juicio abreviado acordado entre la fiscalía, la defensa y la propia imputada. Además, la magistrada impuso una multa de más de 2,7 millones de pesos y ordenó su inmediata expulsión del país.

El contexto de la investigación

Según los investigadores, Callau Barriga mantenía una relación sentimental con Leonardo Monte Alto Gusmao, un piloto brasileño de 50 años acusado de operar la avioneta utilizada para el traslado de la droga. Este vínculo habría sido determinante para su implicación en el caso.

El tribunal consideró varios factores atenuantes, entre ellos su corta edad y la falta de antecedentes penales, así como la desigualdad en la relación con su pareja, lo que influyó en la decisión de otorgarle una pena en suspenso.

Expulsión inmediata a Bolivia

Tras el fallo, la Dirección Nacional de Migraciones declaró irregular su permanencia en Argentina y coordinó su deportación. Callau Barriga fue escoltada por efectivos de la Policía Federal hasta el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, donde abordó un vuelo hacia Santa Cruz de la Sierra.

La exMiss Bolivia llegó en la madrugada del domingo al Aeropuerto Viru Viru, donde fue recibida por autoridades de su país. Su expulsión cierra un episodio que combina narcotráfico, glamour y un duro golpe judicial que la aleja definitivamente del territorio argentino.

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