Argentina cumplió con las metas pactadas con el FMI para 2022

A 48 horas hábiles de finalizar el año, el Ministerio de Economía ya puede mostrar resultados positivos en las tres metas principales que incluye el programa de Facilidades Extendidas con el Fondo Monetario Internacional para este año.



Argentina cumplió este martes con las metas pactadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para este año, dentro del acuerdo de Facilidades Extendidas firmado el 25 de marzo pasado.



El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció que compró en las últimas 48 horas (lunes y martes) más de 150 millones de dólares; con lo que se completaron los U$S 5.800 millones necesarios para aprobar uno de los tres compromisos innegociables que en su momento cerraron Martín Guzmán y Kristalina Giorgieva.



Uno que, por lo que se percibía hacia septiembre, era imposible de cumplir; pero que gracias a los dos programas dólar soja se completó a 48 horas de finalizar el año. Como se descarta que no habrá problemas en seguir sumando divisas entre hoy y mañana; y tal como adelantó este medio el lunes, el FMI recibirá la noticia que la meta de reservas acumuladas en el BCRA quedó sellada.



Esta meta se suma a las otras dos inamovibles. La más importante de todas es a fiscal, y la necesidad que el país logre un desequilibrio primario entre ingresos y gastos de 2,5% como máximo. Según los datos que informó el propio Ministerio de Economía el lunes pasado, el acumulado entre enero y noviembre de 2022 llegó al 1,4%, con lo que en términos numéricos porcentuales tendría en diciembre la flexibilidad de aumentar el ritmo de 0,7/ 0,8%; un nivel que por lo que se viene observando hasta la tercera semana del mes se estaría logrando.



Metas exigentes



Incluso se especula con cerrar el ejercicio con un nivel aún menor al 2,5% para mostrar al FMI, aunque sea de manera simbólica, un sobrecumplimiento de la meta más importante. Y a la espera de los primeros pasos en el 2023, cuando el proceso de reducción del gasto deba acelerarse hasta llegar al 1,9% anual.



Difícil en año un electoral. Pero no imposible, siguiendo el ritmo de disminución del déficit mostrado por el Palacio de Hacienda en el último cuatrimestre del año.



La tercera meta, de emisión monetaria tope de 0,8%, se cumple desde el 1 de octubre de este año; cuando Economía decidió modificar la estrategia de lanzamiento de pesos al mercado, mutando hacia una política de toma de dinero vía tasas de interés y lanzamiento de deuda pública en moneda local en volúmenes crecientes.



Hoy se concertará la última operación del año, mirando más a enero 2023 que a diciembre 2022; asegurando el equipo del ministro de Economía, Sergio Massa, que todo el ejercicio presente está cumplido. 



Mirada escrutadora



Con estos datos sobre la mesa, el Gobierno se presentará ante los examinadores del FMI en la segunda quincena de febrero; una vez que los funcionarios del organismo financiero internacional retornen a sus puestos de trabajo, después del período de fiestas de fin de año.



Los contactos entre Washington y Buenos Aires se retomarán en esas fechas, para comenzar con el examen concreto a comienzos de febrero. Según el cronograma pactado la semana pasada, cuando el Board del Fondo completó el examen del tercer trimestre del año y avaló el período de enero- septiembre; la próxima reunión para tratar el caso argentino se dará en la primera quincena de marzo.



Allí se resolverá (se supone afirmativamente) el primer año de vigencia del Facilidades Extendidas; y se comenzará a hablar del 2023. Se hará sin waivers ni pedidos de perdones sobre las metas. El análisis temático se concentrará entonces en las discusiones sobre los objetivos económicos, cambiarios, impositivos, fiscales monetarios y financieros a cumplir, algo que tiene un nivel de exigencia de cumplimiento sensiblemente menor a las tres metas.



En este sentido, las preocupaciones generales del FMI son y serán las de siempre: la inflación; el nivel de gasto; la falta de avance en dos proyectos comprometidos en su momento por Guzmán, como el aumento real de tarifas y disminución de subsidios y el revalúo fiscal; la política oficial multicambiaria; la brecha entre el oficial; los dólares financieros y el Blue y el alto nivel de vencimiento de deuda en pesos; concentrada entre marzo y agosto.



Como precalentamiento, el propio Fondo habló a través del Board el jueves pasado. Pidió que se reduzcan las cantidades de dólares alternativos, que no haya más moratorias (ni impositivas ni previsionales) avanzar en promesas del acuerdo (revalúo) y alertó seriamente por la inflación. Además de, fundamentalmente, no avanzar en un aumento del gasto público por motivos electorales. Serán los capítulos a discutir desde la segunda quincena de enero.


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