Narcotráfico en San Luis: un sindicalista y empresario lideraba una red millonaria

Juan Carlos Insúa, secretario adjunto del Sindicato Obrero de Frigoríficos y Empleados de la Carne y Afines (SOFECA) y de la Federación de Trabajadores Agrarios (FETARA), permanece detenido desde el año pasado, acusado de liderar una red de narcotráfico que funcionaba desde San Luis. El gremialista también era empresario del rubro cárnico, y según la investigación judicial, financiaba la operación de una estructura que movilizaba cocaína desde Perú hacia Argentina, con epicentro en la Ruta 7.

Los detalles del caso se conocieron tras una serie de allanamientos realizados por Gendarmería Nacional y las policías Federal y de San Luis, bajo la orden del juez federal Juan Carlos Necul, de Villa Mercedes. Las pruebas más comprometedores fueron los audios intervenidos, donde el propio Insúa revelaba su rol central en la organización: "Esto es una empresa. Estamos construyendo nuestro imperio a la talla y a la medida que nosotros queremos", decía con tono de autocelebración.

La banda tenía base operativa en las localidades de Escobar (Buenos Aires), Merlo y Villa Mercedes (San Luis), y se estima que distribuían al menos cinco kilos de cocaína por semana, con ganancias mensuales que habrían alcanzado los 140 mil millones de pesos, una cifra que impactó a los investigadores.

Insúa también alardeaba de su capacidad para evadir controles de ruta gracias a su condición sindical. En una de las grabaciones reconocía: "En el peaje de Junín, la Gendarmería a pleno. Me pararon. Decí que le mandé chamuyo con el sindicato y no me revisaron. De pedo, zafé".

Además de su vida pública como dirigente gremial, Insúa llevaba una vida lujosa que exhibía en redes sociales: viajes en yate, escapadas al exterior y gastos millonarios en efectivo. La investigación también reveló sus planes de expansión: "Con lo que tenés allá y si le sumamos Mendoza, en tres o cuatro meses estamos en otra galaxia, amigo", le decía a uno de sus cómplices en referencia a nuevos puntos de venta.

Junto a él también están detenidos su pareja, su hijo y otras once personas. Durante los operativos se incautaron vehículos de alta gama, armas, una máquina para contar billetes y una importante suma de dinero en efectivo. El caso sigue avanzando en la justicia federal y se espera que en los próximos meses se eleve a juicio.