Paro total en Tierra del Fuego por recorte de aranceles: tensión con el Gobierno

Con una fuerte adhesión sindical, este miércoles 21 de mayo Tierra del Fuego lleva adelante un paro general de 24 horas como respuesta al decreto del presidente Javier Milei que reduce los aranceles de importación para productos electrónicos, como celulares, consolas y televisores. La medida fue publicada en el Boletín Oficial y establece una baja del 16% al 8% en los aranceles a celulares, con la eliminación total prevista para enero de 2026.

Los gremios de la provincia, nucleados en la CGT y ATE, aseguran que la decisión del Gobierno pone en riesgo más de la mitad de los empleos en la industria electrónica fueguina. "Estas políticas atentan contra la producción local y benefician únicamente a intereses foráneos, en nombre de la especulación financiera", expresaron mediante un comunicado conjunto.

La protesta fue convocada "en defensa de la soberanía, los puestos de trabajo y la industria nacional". Para los sindicatos, las medidas responden a exigencias del FMI como parte de un acuerdo de financiamiento que, según denuncian, "es insostenible" y se lleva adelante a expensas del desarrollo productivo del país.

En ese sentido, el documento firmado por las organizaciones gremiales subraya: "Nos ponemos en pie de lucha ante un gobierno entreguista que prioriza el hambre y la miseria por sobre el bienestar del pueblo trabajador".

Como intento por calmar los ánimos, el Gobierno nacional anunció este martes la creación de un régimen simplificado para la compra de productos fueguinos desde el continente, a través del Decreto 334/2025. Este mecanismo busca facilitar el acceso a productos fabricados en la isla, permitiendo que cada persona compre hasta tres unidades por año con un tope de 3.000 dólares por envío, solo para uso personal y no comercial.

El nuevo sistema también obliga a las empresas a habilitar plataformas de venta online para operar bajo este régimen, intentando mantener algo de competitividad para los fabricantes locales.

Sin embargo, los gremios consideran que estas medidas paliativas no alcanzan. "Estamos frente a un desmantelamiento planificado de la matriz productiva de la provincia", remarcaron.

El conflicto, que amenaza con profundizarse, abre un nuevo capítulo de tensión entre el Ejecutivo nacional y las economías regionales, con Tierra del Fuego en el centro de la escena como símbolo de la resistencia gremial y productiva ante un modelo que prioriza la apertura total de mercados y la reducción del rol del Estado en la economía.