Diego Bossio: "Javier Milei viene a dinamitar la democracia"
El jefe de campaña de Juan Schiaretti analiza el vacío que dejó Cristina Fernández de Kirchner en el peronismo y la posibilidad de ampliar Juntos por el Cambio a pedido de Horacio Rodríguez Larreta. Su advertencia sobre Javier Milei. Entrevista a fondo con Diego Bossio.
- Se bajó Cristina Fernández de Kirchner. De acuerdo tu trayectoria en el peronismo, ¿quién pensás que va a heredar la jefatura del peronismo ahora?
- Dos cosas. Primero, veo una situación muy frágil de lo político en la actualidad en la Argentina, muy frágil, porque el oficialismo está sin hipótesis electoral, es decir, está sin candidato. Le está costando tener un candidato nítido. Claro. El presidente de la Nación, que tiene la posibilidad constitucional de un segundo mandato, renunció a esa capacidad, esa facultad que tenía. La situación es frágil también en la oposición. Mauricio Macri, expresidente, también, no tiene la fortaleza que tenía en otro momento ni para proponer ni para vetar. Con lo cual vamos a un proceso eleccionario en donde hay mucha incertidumbre desde la política y eso se está viendo también en el mercado financiero, se está viendo en los dólares paralelos y demás. Con respecto al capítulo del peronismo, yo creo que este Gobierno ha fracasado, este Gobierno no ha podido cumplir el mandato que tuvo frente a la sociedad en 2019, que era mejorar sustancialmente los ingresos, mejorar las condiciones de vida, todo lo contrario. Ha habido un retroceso social muy grande. Lo marca básicamente la inflación, la inflación de 110 puntos actual, pero que puede terminar en 120%, 130% este año. Es es una inflación muy alta que carcome la base de representación del peronismo.
- Vos sos un dirigente claramente identificado con el peronismo y Juan Schiaretti también. Ante este diagnóstico ¿por qué ustedes resolvieron dar la pelea afuera del peronismo y no por dentro?
- Por lo que te decía antes, todo lo que multiplica por K da K. Entonces no hay mucho horizonte. Fijate lo que pasa hace pocos días un congreso del Partido Justicialista donde supuestamente se se formalizado en cuestiones que tienen que ver con lo electoral y es un ámbito de debate. Antes de terminar el Congreso sale una carta de Cristina. El Congreso quedó en un segundo plano y la carta de Cristina es lo sustancioso. La presencia de Cristina como una dirigente político de envergadura y vicepresidenta de la Nación que puso por un tuit a Alberto Fernández, que forma parte de esta expresión política que fue dos veces presidenta de la Nación y que forma parte de una expresión política muy importante. No puede ser que el peronismo esté peleado con el agro, no es el caso de Schiaretti, que tiene una relación intrínseca y una relación profunda con los sectores agroindustriales de la Argentina. Sin embargo, gran parte del peronismo está peleado con los sectores agrícolas. Lo mismo pasa con la economía del conocimiento. Vos hablás con quienes desarrollan esa economía del conocimiento y están muy alejadas de las ideas de quienes conducen hoy el peronismo y sin embargo, son producto de la universidad pública.
- El gobernador Juan Schiaretti propuso ante la UIA el armado de un frente de frentes. ¿Se avanzó en algo concreto con Juntos por el Cambio?
- El Gringo (Schiaretti) fue claro en esa reunión, yo participe con él, lo que dijo es que la Argentina necesitaba sentido común y racionalidad, que el momento que se vivía era de mucha fragilidad y requería de mucha musculatura política, de muchos acuerdos para poder llevar adelante un proceso de transformación en la Argentina y que para eso había que terminar con la maldita grieta. Y en ese sentido, que hablaba con dirigentes políticos de todo el arco, como lo hizo en Córdoba, lograr un acuerdo con aquellos que estén convencidos que la anti grieta, es decir, el método para resolver las cosas, el diálogo, el acuerdo, la posibilidad de mirar las cosas con un sentido más amplio que los propios intereses particulares de cada expresión política, sea la forma en cual, en cómo se resuelvan los temas.
-¿Puede variar la posibilidad de armar ese frente de acuerdo a quién sea el candidato Juntos, Horacio Rodríguez Larreta o Patricia Bullrich?
- Yo no quiero entrar en cuestiones tácticas porque muchas veces en lo táctico que es sustancial, terminamos perdiendo lo estratégico. Yo creo que la Argentina necesita profundas transformaciones para cambiar el orden político. Esas transformaciones tienen que ser creíbles por la sociedad. La sociedad las tiene que adoptar como propias y para eso se necesita mucha musculatura política. Por eso, si no hay diálogo y hay pelea de sordos, cada uno se habla a sí mismo. Lo que va a pasar es que esa transformación no se va a realizar. Y en ese sentido creo que lo que propone Juan Schiaretti es un método para empezar a resolver los temas. Si esto se materializa o no en términos electorales, veremos en las próximas semanas.
- ¿Qué pensás de la irrupción en el escenario electoral de Javier Milei?
- Es un síntoma de una sociedad que está harta. La mayoría está cansada, no se resuelven los problemas cotidianos. Y aparece Javier Milei, que viene a dinamitar la democracia. Viene a decir se vayan ya todos. Propone un mercado de órganos, que haya el libre portación de armas. Dolarizar, suprimamos el Banco Central, las escuelas que funcionen de forma privada. Son cuestiones que primero, no sé si se pueden instrumentar desde el punto de vista constitucional. Sería bueno regalarle una Constitución para que la lea, para que sepa que es lo que nos organiza como sociedad. Segundo, yo creo que dinamitar las bases sustanciales de la democracia no es la solución. Yo creo que la solución es que la política de los esfuerzos que tiene que hacer y que empecemos a resolver aquellas cuestiones de crecimiento y de mejora de la calidad de vida que están postergadas ya hace muchos años en la Argentina. Todo lo que él propone no se puede instrumentar bajo ningún punto de vista, ni desde lo político, ni desde el respeto de los institucional, ni desde el respeto de alguien que quiere conducir la Argentina sin templanza. Uno lo escucha y dice el primer objetivo de un gobierno es que haya paz. Yo creo que no es posible dialogar con alguien que descalifica de forma permanente. Tiene razón que quienes gobiernan o quienes gobernamos de alguna manera desorganizan la vida de los argentinos y por eso la gente sintoniza con eso. Pero lo que propone no lo resuelve. Todo lo contrario. Viene a dinamitar la Argentina, viene a profundizar las diferencias, viene a generar una situación mucho más conflictiva.
- ¿Rescatas algún aspecto del Gobierno de Axel Kicillof?
- No, no. No es nada transformador. Imaginate que es un gobernador que para armar su Gabinete tuvo que ir a Calafate, Santa Cruz, que su mano derecha ahora es asesor producto de una decisión en Santa Cruz. Así está el gobernador de la provincia de Buenos Aires. Nosotros tenemos que concentrarnos en dar un salto exportador, que son los verdaderos dólares genuinos. Y para eso hay que hacer una alianza muy fuerte entre la política y los sectores productivos, entre el agro, los sectores que producen energía, los sectores que producen conocimiento, los sectores que producen minería. En siete provincias en la Argentina está prohibida la minería. Es el área de mayor prohibición de minería, de actividad minera del mundo. Nuestra vocación con Juan Schiaretti es trabajar estos temas. - ¿Qué rescatas del Gobierno? - Es tan difícil y tan complicado rescatar cosas cuando llegás a 40% de pobreza, 130 puntos de inflación o 50 en el caso de Macri, cuando hay un desorden político tan grande, cuando no se puede nombrar el procurador, al jefe lo fiscal y cuando la Corte Suprema no puede nombrar al último integrante. Te diría que al cumpliéndose 40 años de democracia, tenemos que reflexionar por qué llegamos hasta acá. Seguramente hay cosas para rescatar de todos los Gobiernos, hemos dejado atrás la dictadura, se jugó la sociedad argentina y los mecanismos institucionales tuvieron un mecanismo para juzgar todos eso, esos hechos dolorosos de la historia argentina. Tuvimos la oportunidad de ganar derechos, hemos tenido momentos de estabilidad, hemos tenido momentos de crecimiento, pero el balance hoy es que hay 40% de pobres, mucho de los chicos están debajo de la línea de pobreza.
MDZ