¿Qué hará Milei tras la suba de jubilaciones aprobada por el Congreso?
El Congreso aprobó por segunda vez un aumento en las jubilaciones mínimas, con un 7,2% de suba y un bono actualizado a $110.000. La medida, impulsada por la oposición, enfrenta un inminente veto presidencial. Javier Milei, que considera que estas iniciativas comprometen su plan de superávit fiscal, ya anticipó su rechazo y el Congreso se prepara para una nueva batalla legislativa.
Por segunda vez en lo que va del mandato de Javier Milei, el Congreso le dio la espalda y sancionó una ley que mejora los haberes jubilatorios: el Senado aprobó un aumento del 7,2% y elevó el bono previsional a $110.000. Con esta medida, la jubilación mínima pasaría de $379.295 actuales (incluido el bono de $70 mil) a $441.564. El incremento representa un 16,4% más en términos nominales y un 11,2% en términos reales respecto a diciembre de 2023.
Esta decisión legislativa, sin embargo, está lejos de cerrar el debate. Desde Casa Rosada, Javier Milei ratificó su intención de vetar la ley, calificándola como un intento de la oposición de dinamitar su programa económico basado en el superávit fiscal. En caso de que no prospere el veto, el oficialismo evalúa acudir a la Justicia, aunque los propios constitucionalistas advierten que esa vía tiene escasos fundamentos legales y podría implicar una validación indirecta de la ley.
El Ejecutivo también busca derribar los artículos que restituyen la moratoria previsional y declaran la emergencia en discapacidad. Para la administración libertaria, estos gastos adicionales-estimados en 1,125% del PBI-desequilibrarían el delicado esquema fiscal. Sin embargo, los impulsores de la ley sostienen que existen fuentes de financiamiento viables: proponen eliminar exenciones impositivas y redireccionar fondos asignados por decreto a organismos de inteligencia.
El diputado Esteban Paulón (Encuentro Federal) afirmó que la iniciativa busca "reconstruir un poco la pirámide de ingresos de los jubilados" y denunció que "son ellos quienes están financiando el ajuste de Milei y Caputo". Por su parte, Pablo Juliano, de Democracia para Siempre, sostuvo que el Gobierno prioriza partidas para inteligencia en vez de atender a quienes "la están pasando pésimamente mal".
El oficialismo, en tanto, redobla su ofensiva. La legisladora libertaria Rebeca Fleitas acusó a la oposición de actuar con irresponsabilidad al no especificar cómo se financiará el aumento. "El sistema jubilatorio está quebrado y no se puede seguir aumentando sin crear empleo genuino", señaló. También recordó que "Cristina Kirchner vetó el 82% móvil" y que "cerraron las AFJP", marcando una continuidad del deterioro previsional.
En la Cámara de Diputados se abre ahora un nuevo capítulo. La Libertad Avanza necesita asegurarse al menos 86 votos para evitar que la oposición logre los dos tercios necesarios para rechazar el eventual veto presidencial. Desde la oposición aseguran que cuentan con los números para insistir, aunque la moratoria previsional sería el punto más débil del paquete aprobado.
"Estamos trabajando para ratificar la ley, que es una respuesta humana que tenemos que dar", aseguró el diputado Juliano. Paulón, por su parte, señaló que "la torpeza del Gobierno ha generado un desgaste en su base de apoyo" y confía en que el clima legislativo actual permitirá ratificar la iniciativa.
Mientras tanto, los jubilados-más de 2,9 millones que cobran la mínima-aguardan una resolución que podría mejorar su situación económica, tras meses de pérdida de poder adquisitivo. La pulseada legislativa está servida, y en el centro de la disputa está uno de los sectores más vulnerables del país.