Tras la cumbre del Mercosur, Lula se reunirá esta tarde con Cristina Kirchner
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cerrará este jueves su participación en la Cumbre del Mercosur en Buenos Aires con una visita privada a la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner. La reunión, autorizada judicialmente, se realizará en el departamento donde la expresidenta cumple prisión domiciliaria tras ser condenada por la causa Vialidad.
En un gesto de fuerte carga política, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, visitará esta tarde a Cristina Fernández de Kirchner, quien cumple prisión domiciliaria en su vivienda del barrio porteño de Constitución, luego de ser condenada a seis años de cárcel en el marco de la causa Vialidad. La reunión se concretará tras la finalización de la cumbre del Mercosur que se desarrolla este jueves en el Palacio San Martín de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El encuentro fue autorizado por el juez Jorge Gorini, presidente del Tribunal Oral Federal 2, quien interviene como juez de ejecución de la condena. En su resolución, Gorini señaló que la visita deberá respetar las condiciones impuestas en el arresto domiciliario, entre ellas la prohibición de generar alteraciones que perturben la tranquilidad del vecindario.
"Autorízase a Cristina Fernández de Kirchner a recibir la visita del presidente de la República Federativa de Brasil, Luiz Inácio da Silva, en el domicilio donde cumple su prisión domiciliaria", indicó el magistrado. Asimismo, se estableció que el ingreso de los integrantes de la lista "reservada" -familiares, abogados, custodios y médicos- no requerirá autorización previa.
La defensa de Fernández de Kirchner solicitó el permiso ante la llegada de Lula al país, en el marco de la cumbre de presidentes del bloque regional. La visita se leerá inevitablemente como una muestra de respaldo del mandatario brasileño a la exvicepresidenta argentina, quien aún mantiene fuerte presencia en el escenario político nacional pese a su condena.
La jornada marca un nuevo capítulo en la relación entre ambos líderes, quienes comparten una historia de cercanía ideológica y militancia regional. Esta señal, en medio del escenario de polarización política en Argentina, puede tener múltiples interpretaciones, tanto en clave interna como internacional.