Alarma en el aeropuerto de Comodoro Rivadavia por una mujer que dijo llevar una bomba
Una mujer fue detenida este domingo 7 de diciembre de 2025 en el aeropuerto de Comodoro Rivadavia tras afirmar que llevaba una bomba en su equipaje antes de abordar un vuelo con destino a Aeroparque. La PSA evacuó la zona de preembarque, aplicó el protocolo antibombas y paralizó los vuelos durante 40 minutos. El operativo arrojó resultado negativo y la Unidad Fiscal dispuso la requisa de la mujer y sus pertenencias.
Momentos de tensión se vivieron en la tarde del domingo 7 de diciembre de 2025 en el aeropuerto de Comodoro Rivadavia, cuando una mujer aseguró que llevaba una bomba dentro de su equipaje de mano momentos antes de abordar un vuelo rumbo al Aeroparque Jorge Newbery de Buenos Aires, programado para despegar a las 15:30.
La situación obligó a la intervención inmediata de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), que activó el protocolo para amenazas de artefactos explosivos y ordenó evacuar la zona de preembarque. La mujer se encontraba acompañada por su hija al momento del episodio.
Evacuación, operativo y vuelos demorados
El equipo GEDEX -especialistas en desactivación de explosivos de la PSA- realizó un operativo que abarcó un radio de aproximadamente 100 metros dentro de la terminal. Durante ese lapso, todos los pasajeros, personal aeroportuario y tripulaciones debieron retirarse del sector afectado.
Uno de los vuelos alcanzados por la interrupción fue un servicio procedente de Córdoba: logró aterrizar, pero sus pasajeros permanecieron dentro de la aeronave hasta que la PSA completó el chequeo.
Tras la inspección, el protocolo arrojó resultado negativo: ni la mujer ni su equipaje, que no incluía valijas despachadas, presentaban riesgo alguno.
La situación quedó en manos de la Justicia Federal
Luego del operativo, la terminal aérea retomó su funcionamiento habitual tras unos 40 minutos de interrupción total. En paralelo, la Unidad Fiscal de Comodoro Rivadavia dispuso la requisa de las pertenencias de la mujer y la continuidad de las actuaciones correspondientes.
El caso generó preocupación entre los pasajeros que aguardaban los vuelos nacionales y reabrió el debate sobre las consecuencias de emitir falsas amenazas dentro de instalaciones aeroportuarias, donde cualquier comentario puede activar protocolos estrictos de seguridad.
(Fuente: El Diario Nuevo Día)

