Caleta Olivia: gran despliegue policial tras alerta por posible violencia familiar
Este domingo a las 11:10, la Policía de Santa Cruz desplegó un amplio operativo en el Barrio 8 de Julio de Caleta Olivia tras un llamado al 911 que alertaba sobre una mujer supuestamente agredida por un hombre armado. La intervención incluyó móviles de varias comisarías, Infantería y Fuerzas Especiales. Tras evacuar a la joven de 18 años y a su bebé, se comprobó que se trataba de una discusión verbal sin agresiones físicas ni presencia de armas.
La mañana del domingo 23 de noviembre tuvo un fuerte despliegue policial en Caleta Olivia. A las 11:10, personal de la Comisaría Segunda fue enviado a un departamento de la Escalera Nº 1 del Barrio 8 de Julio después de que el sistema de emergencias 911 recibiera un aviso indicando que una mujer estaría siendo agredida y que el agresor podría estar armado.
Ante la posibilidad de un riesgo inminente, el equipo en el lugar solicitó refuerzos, tal como establece el Protocolo Operativo Estándar (POE) para este tipo de situaciones.
Refuerzos, anillo de seguridad y evacuación preventiva
Al inmueble llegaron móviles de las Comisarías Cuarta y Quinta, además del Cuerpo de Prevención Barrial. Para asegurar el área y resguardar a vecinos y al personal, la Guardia de Infantería Zona Norte conformó junto al Comando de Patrullas el primer anillo de seguridad, medida clave para aislar el domicilio y permitir un abordaje seguro.
Durante el operativo, una joven de 18 años salió del departamento en dos oportunidades, la segunda de ellas con su bebé de un mes. Ambos fueron trasladados rápidamente a una zona segura. La mujer afirmó que solo había mantenido una discusión verbal con su pareja, negando agresiones físicas o la presencia de armas.
La situación tomó otro giro cuando llegó la madre de la joven, quien reconoció haber llamado al 911 tras recibir comentarios de un tercero. La joven reiteró que no había pedido auxilio ni enviado mensajes alertando sobre malos tratos.
Intervención de autoridades y cierre del procedimiento
Mientras la policía dialogaba con las partes, arribaron las Fuerzas Especiales Zona Norte y autoridades superiores, incluido el Director Regional Zona Norte. Tras evaluar la escena, se determinó que no existía un peligro real inmediato y que cualquier ingreso al domicilio debía contar con orden judicial.
Un equipo sanitario ofreció realizar controles, pero ambas partes decidieron no ser examinadas. Luego, la joven y su bebé fueron trasladadas a la Comisaría de la Mujer y la Familia, donde recibieron asistencia profesional.
A las 12:30, el hombre de 36 años involucrado salió voluntariamente del departamento y aseguró que se trató de una discusión de pareja, negando agresiones y la tenencia de armas.
Por disposición del Juzgado de Familia, se permitió que la joven retirara sus pertenencias y se dictaron medidas cautelares recíprocas entre ambas partes, cerrando así un operativo que, pese a la magnitud del despliegue, no confirmó hechos de violencia física ni presencia de armas.

