Chile evalúa una medida para retener argentinos que van por "tour de compras"

Chile evalúa implementar una medida que podría cambiar el juego para el turismo de compras: la devolución del IVA a los turistas no residentes. La propuesta, presentada en mayo de 2024, plantea reembolsar el 19% del impuesto a quienes realicen compras durante su estadía en el país vecino, una estrategia que apunta directamente a reactivar el turismo y potenciar la competitividad comercial frente a países como Argentina.

El proyecto de ley fue aprobado en general por el Senado chileno en diciembre pasado, pero desde entonces quedó estancado tras ser devuelto a comisión por modificaciones en su redacción. Pese a los pedidos de urgencia del Ejecutivo, el texto lleva más de un año sin avances concretos, lo que genera preocupación entre comerciantes y actores del sector turístico, particularmente en las zonas fronterizas como Osorno, donde los argentinos representan una porción clave del movimiento económico.

Según el proyecto, los turistas podrían solicitar la devolución hasta dos veces por año, siempre que el monto de compra supere las 0,5 UF (alrededor de 21 dólares). El tope máximo de reintegro sería de 15 UF (aproximadamente 610 dólares), descontando los costos administrativos. La medida alcanzaría únicamente a bienes físicos adquiridos para uso personal, y no aplicaría a servicios ni consumos cotidianos.

Para los argentinos, el cruce de la cordillera en busca de mejores precios en tecnología, indumentaria, alimentos y productos de cuidado personal ya es una práctica habitual. De aprobarse esta iniciativa, el incentivo económico directo podría profundizar aún más esa tendencia, en un contexto donde la brecha cambiaria y las restricciones locales continúan empujando al turismo hacia destinos más accesibles.

Más allá del ahorro, el turismo chileno apuesta a consolidar una experiencia más integral: alojamiento, gastronomía, paisajes y servicios complementarios. En ese sentido, regiones como Osorno podrían sacar ventaja de su cercanía y de una oferta variada que no solo atrae por los precios, sino por la calidad del servicio y la seguridad.

Por ahora, el futuro del proyecto permanece en suspenso, pero su eventual aprobación podría representar una oportunidad concreta para fortalecer los lazos turísticos y comerciales con Argentina. En tiempos de ajustes y bolsillos apretados, cada peso que se devuelve puede convertirse en un argumento para volver. (Fuente: El Diario Nuevo Día)