Crueldad animal: suspenden adopciones de animales negros y blancos para evitar rituales y abusos
En Comodoro Rivadavia, grupos proteccionistas decidieron suspender durante octubre la adopción de perros y gatos de pelaje negro y blanco. La medida busca prevenir casos de crueldad animal vinculados a supersticiones, rituales umbanda y Halloween, que suelen aumentar en este mes.
En Comodoro Rivadavia, las organizaciones de defensa animal anunciaron que suspenderán la adopción de perros y gatos negros y blancos durante octubre. La medida preventiva, que se repite cada año, busca evitar que los animales sean utilizados en rituales umbanda, prácticas supersticiosas o incluso como "adornos" en la noche de Halloween.
Desde las redes de adopción responsable señalaron que, en esta época, aumentan los pedidos de animales con estas características por motivos ajenos al bienestar animal. "Cada año aparecen mutilados, decapitados o con signos de tortura. Es un riesgo demasiado alto", advirtieron.
Ritualismo y superstición
Aunque desde algunos sectores se pide no estigmatizar creencias religiosas, las proteccionistas afirman que existen pruebas de que ciertos grupos utilizan animales de color negro y blanco en prácticas vinculadas al sincretismo afrobrasileño y rituales de brujería. Esto, sumado a la moda de Halloween, incrementa el peligro para miles de perros y gatos en situación de adopción.
"Los animales no son objetos ni mercancías. Un gato o perro negro y blanco es un compañero de vida, con tanto derecho a ser amado y protegido como cualquier otro. Esta pausa en las adopciones es un mal necesario para salvarlos", indicaron desde la agrupación Comodoro Animal.
El llamado a la adopción responsable
Más allá de la suspensión, el mensaje central de las organizaciones sigue siendo claro: la adopción debe ser responsable y comprometida. "Si pensás en adoptar, que sea con responsabilidad, amor y compromiso de por vida. Ayudanos a difundir. Decí NO a la crueldad", remarcaron en un comunicado.
Además, recordaron tres recomendaciones clave: difundir la información para generar conciencia comunitaria, denunciar cualquier caso de maltrato ante las autoridades y fomentar la castración como única forma efectiva de controlar la población animal y prevenir el abandono.