Imputaron al joven que causó cuatro muertes en la Ruta 22: manejaba a 170 km/h
La Justicia de General Roca imputó a Axel Adrián Araneda, de 29 años, por el choque ocurrido el viernes en la Ruta Nacional 22, entre Fernández Oro y Allen, donde murieron cuatro integrantes de una familia. Según la fiscalía, el conductor circulaba a 170 km/h y bajo los efectos de alcohol y estupefacientes, cuando invadió el carril contrario y embistió a una Ford Ecosport. El caso podría derivar en una pena de 3 a 6 años de prisión.
En la Ciudad Judicial de General Roca, la Justicia imputó a Axel Adrián Araneda, de 29 años, como responsable del siniestro vial que el viernes pasado dejó un saldo devastador en la Ruta Nacional 22, en el tramo que une Fernández Oro con Allen.
La jueza de Garantías Claudia Lemunao presidió la audiencia en la que la fiscal Celeste Benetti atribuyó al acusado el delito de homicidio culposo agravado, una figura que contempla penas de 3 a 6 años de prisión.
Según expuso Benetti, Araneda conducía una Volkswagen Amarok a una velocidad estimada en 170 km/h, bajo los efectos de alcohol y sustancias prohibidas, cuando perdió el control del rodado e invadió el carril contrario. "El impacto frontal era inevitable a esa velocidad", remarcó la fiscal en su presentación.
Resultados toxicológicos y víctimas del siniestro
La causa incorporó análisis que indicaron que Araneda tenía "entre 0,78 y 1,09 g/l de alcohol en sangre", además de estupefacientes. Para el Ministerio Público, esos valores confirman una conducta peligrosa y directamente relacionada con el desenlace fatal.
En el otro vehículo, una Ford Ecosport, viajaba una familia oriunda de Catriel. Las víctimas fueron identificadas como Liliana Cocuzza, médica; su hija Karina Gutiérrez; y dos niños, todos fallecidos en el acto.
El único sobreviviente, Justo Pastor Gutiérrez, de 65 años, recibió atención en el hospital y fue dado de alta horas más tarde.
La defensa planteó otra hipótesis, pero la acusación se mantiene firme
Durante la audiencia, la defensa de Araneda intentó relativizar su responsabilidad. Señalaron que un tercer vehículo habría frenado súbitamente por la caída de una valija en plena ruta, lo que -según su versión- habría obligado al acusado a realizar una maniobra brusca que derivó en la invasión del carril contrario.
También sostuvieron que Araneda intentó asistir a las víctimas después del impacto.
Sin embargo, la fiscalía reafirmó que las pericias técnicas, los registros de velocidad y los análisis toxicológicos sostienen la hipótesis de una conducción temeraria.
Con la imputación formalizada, la causa continuará su curso y el joven conductor podría enfrentar una condena de hasta 6 años de prisión, además de la inhabilitación para conducir.

