Inseguridad urbana

Robaron dos veces en 48 horas: prisión para pareja con más de 70 antecedentes

Una pareja fue detenida tras cometer dos violentos robos con intimidación en la tienda The North Face de Punta Arenas. Camila Saldivia, con 55 detenciones previas, y Rodrigo Morel, con 22 causas, quedaron en prisión preventiva por decisión del juez. Las amenazas con supuestas armas generaron pánico entre las empleadas del local.

Redacción Nuevo Día
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Camila Andrea Saldivia Flández y Rodrigo Alberto Morel Ballesteros fueron detenidos tras protagonizar dos violentos robos en la céntrica tienda The North Face, ubicada sobre calle Bories, a solo una cuadra de la Plaza de Armas de Punta Arenas. Ambos quedaron en prisión preventiva luego de que el juez Franco Reyes considerara que su libertad representaba un claro peligro para la sociedad.

La mujer, de 35 años, tiene un extenso prontuario policial con 55 detenciones registradas en distintas ciudades del país como Temuco, Castro, Valdivia y Loncoche. Su cómplice, de 29 años, también cuenta con 22 causas judiciales por distintos delitos como robo con intimidación, lesiones y amenazas.

El primer asalto ocurrió el sábado 7 de junio. La pareja ingresó al local comercial con intenciones de robo, y al ser descubiertos por una empleada, simularon estar armados y la amenazaron de muerte. Se llevaron varias prendas de vestir. Minutos después, regresaron y repitieron el robo, llevándose otras parkas valuadas en más de un millón y medio de pesos.

Pero no se detuvieron ahí. El lunes 9 de junio, regresaron al mismo local, con la misma vestimenta y aún más violentos. Amenazaron nuevamente a las empleadas con "balearlas" si no se tiraban al piso. Esta vez, se llevaron ropa por un valor estimado en más de cuatro millones de pesos. "Quedé con mucho miedo porque esta mujer me amenazó", declaró una de las vendedoras ante la Justicia.

Gracias a las grabaciones de las cámaras de seguridad y al análisis de huellas, Carabineros del OS-9 logró detenerlos en tiempo récord. En el allanamiento se encontraron varias de las prendas robadas, aunque no se hallaron armas. Por eso, el defensor público Ramón Bórquez argumentó que, si bien existieron amenazas, los acusados nunca portaron armas reales.

Saldivia y Morel fueron formalizados por "robo con intimidación, consumado y reiterado". El juez consideró, además, que ambos son foráneos y presentan antecedentes graves. La mujer incluso declaró tener una pensión por discapacidad, pero no se presentaron pruebas de su inimputabilidad.

El caso generó fuerte repercusión en la ciudad, no solo por la violencia de los hechos, sino también por la reincidencia criminal de los imputados, que ahora enfrentarán el proceso judicial tras las rejas.

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