Sin anunciarlo, el gobernador de Chubut emitió deuda en pesos y dólares por cifras millonarias
El Gobierno del Chubut realizó en silencio dos nuevas emisiones de deuda por más de 50 mil millones de pesos y más de 41 millones de dólares. Una operación fue orientada a reestructurar pasivos anteriores y la otra, en moneda local, tuvo una fuerte demanda del mercado. Ambas forman parte de un programa que busca oxigenar las cuentas provinciales, aunque sin discusión pública ni transparencia.
En medio de un panorama económico frágil y con escasa comunicación oficial, el Gobierno del Chubut concretó en las últimas semanas dos nuevas emisiones de deuda por montos millonarios, sin que mediara anuncio público ni debate institucional. La primera de ellas, oficializada el 28 de mayo, consistió en un canje de Letras del Tesoro por un valor nominal de 41,1 millones de dólares. La operación no implicó nuevo endeudamiento neto, pero sí significó prolongar compromisos previos, con vencimiento en 2026 y una tasa que no superará el 9,95% anual.
La maniobra se realizó con la participación de la ANSES, que aceptó recibir los nuevos títulos a cambio de los papeles anteriores. Lo llamativo es que, pese a tratarse de deuda nominada en dólares, los pagos se efectuarán en pesos al tipo de cambio oficial, una modalidad que podría generar pérdidas para el organismo previsional. El respaldo ofrecido por el Gobierno de Chubut son los fondos de coparticipación federal, lo que supone comprometer ingresos garantizados para atender esta deuda, aun en un contexto de urgencias sociales.
La segunda colocación se concretó el 18 de junio y fue aún más significativa: se trata de una emisión en pesos por 50.000 millones, correspondiente a la Serie CXIII. El monto inicial previsto era de apenas 10.000 millones, pero la sobredemanda llevó a quintuplicar la adjudicación, lo que generó suspicacias respecto del destino real de los fondos. En sectores gremiales y políticos se especula con que parte del dinero será utilizado para cubrir el pago del medio aguinaldo a estatales, dado que la masa salarial mensual ronda los 121.100 millones de pesos.
El mecanismo elegido fue una subasta holandesa, que define la tasa de interés según la demanda del mercado. En este caso, la tasa es flotante y combina la TAMAR Privada con un adicional del 5,5%, lo que implica un costo de deuda que puede crecer sensiblemente si la inflación o las tasas del sistema financiero se disparan.
Ambas maniobras están enmarcadas en un programa global de endeudamiento aprobado por ley, que autoriza al Ejecutivo a tomar hasta 200 millones de dólares -o su equivalente-, pero el modo en que se viene ejecutando ese permiso deja dudas sobre la transparencia, la planificación financiera y los efectos a mediano plazo en las arcas provinciales. En definitiva, Chubut parece seguir atada a la rueda del endeudamiento, ahora sin Mariano Arcioni, pero con la misma lógica. (Fuente: ADN Sur - modificado por Nuevo Día)