Eventual candidatura de Máximo Kirchner, en el centro del debate
El hijo de la Presidenta dijo que podría postularse y salieron los oficialistas a ensalzarlo y los opositores a criticarlo. Del “sabe muchísimo” de Bonafini al “campeonato de play” de Moyano.
Sin prisa, sin pausa. Esa parece ser la
estrategia del kirchnerismo puro, a cuatro meses de las PASO y seis de
las generales, para instalar en la escena preelectoral la posibilidad de que
Máximo Kirchner, el hijo de los presidentes de los últimos doce años, debute
electoralmente este año.
Desde que el martes pasado, cuando el líder de
la agrupación La Cámpora admitió en declaraciones periodísticas, primeras de
tipo político por un medio de comunicación en sus 38 años de vida, la
posibilidad de ser candidato se sucedieron obvios pronunciamientos a favor en
el oficialismo, como adversos y hasta capciosos en la oposición.
En la entrevista radial del martes pasado con
el periodista Víctor Hugo Morales, Máximo Kirchner desmintió que tenga cuentas
bancarias en el exterior; aprovechó para deslizar la posibilidad de ser
candidato a algún cargo electoral y, a tono con la estrategia practicada por la
Presidenta, buscó la polarización ideológico-política hacia el 25 de octubre
con el jefe de gobierno porteño y candidato presidencial del Pro: fue a
Mauricio Macri al único aspirante opositor al que puso en condición de "el
adversario del proyecto”; y lo hizo con nombre propio.
Gustoso del papel de primer opositor en el que
lo coloca el kirchnerismo, Macri no tardó en tomar la posta. Dijo que el Pro y
el kirchnerismo representan dos modelos distintos de país y chicaneó respecto
del jefe de La Cámpora: "Festejo que haya salido de la oscuridad y que hable.
Me parece positivo que dé sus opiniones”.
Quizás por sentirse hecho a un lado en esa
polarización por ser el "primer opositor” que le gustaría ocupar, o al menos
disputar en la consideración pública, el diputado Sergio Massa no demoró en
subirse a la escalada retórica. "Me preocupa mucho más el mínimo imponible del
impuesto a las Ganancias que la candidatura de Máximo Kirchner”, dijo el
viernes el candidato presidencial por el Frente Renovador (FR). "Lo importante
no son los nombres ni las candidaturas”, agregó.
Tanto Massa como Macri han prometido por estos
días, coincidentemente con el paro general del martes pasado convocado por el
sindicalismo opositor, aunque sin decir cómo lo harán, que de ser electos
presidente eliminarán al día siguiente de asumir el polémico gravamen que
afecta a los trabajadores con sueldos bruto superiores a 15 mil pesos en agosto
de 2013, pese a la inflación registrada desde entonces.
Ni bien Máximo Kirchner hizo pública su
intención de ser candidato por el oficialismo en 2015, en su reaparición
pública tras su debut en setiembre pasado, ante unas 40 mil personas, en el
acto organizado por La Cámpora en Argentinos Juniors, no faltaron los exégetas
oficialistas que ya lo vieron hasta presidenciable (por caso, el camporista
diputado Juan Cabandié).
Del mismo modo, desde la vereda opositora lo
ningunearon. "Puede ser un buen candidato al campeonato mundial de
playstation”, dijo el jefe del sindicato de camioneros, Pablo Moyano. O
atribuyeron su intención electoral al exclusivo propósito de lograr inmunidad
ante causas judiciales por supuesta corrupción.
"Lo que buscan Máximo y la mamá de Máximo son
fueros. Dilatar la convocatoria que les va a hacer la Justicia pronto. Desde el
vicepresidente para abajo, están todos camino a Comodoro Py (sede porteña de
los juzgados federales)”, dijo el jefe de la CGT Azul y Blanca, el gastronómico
Luis Barrionuevo.
La descalificación del Moyano hijo primogénito
del jefe de la CGT opositora alcanzó a los cargos ejecutivos, algo que el
kirchnerismo no parece prever para el debut electoral de Máximo. Es que el
secretario general de La Cámpora, Andrés Larroque, dijo que la postulación
eventual del hijo de los Kirchner se discutirá en "la mesa política” de la
agrupación y deslizó que podría ser candidato a diputado nacional.
Lo que no aclaró es si será por la provincia de
Buenos Aires o la de Santa Cruz.
Entre los múltiples y muchos de ellos
sobreactuados respaldos a una candidatura de Máximo Kirchner, sobresalió el del
ahora secretario de Inteligencia, Oscar Parrilli, por su añosa relación con los
Kirchner. "El tiempo lo dirá, no hay que desesperarse ni apurarse. Sin dudas va
a tener protagonismo, es uno de los mejores cuadros jóvenes que tiene la
política argentina, y me parece que alguna responsabilidad va a tener”, dijo el
ex secretario de las presidencias K, desde diciembre pasado a cargo de la ex
Side.
Políticamente "incorrecta”, Hebe de Bonafini no
dejó de sentar su posición. "Con cualquier candidatura (de Máximo Kirchner), la
oposición se va a la mierda. Al aparecer Máximo, les agarró un miedo que ni te
cuento. Es un tipo inteligente, brillante, humilde, y sabe muchísimo de
política”, afirmó en un comunicado.
Scioli, contra los que cambian su discurso
El gobernador bonaerense y precandidato
presidencial por el oficialismo, Daniel Scioli, cuestionó a los dirigentes
políticos que en campaña electoral "a cada sector le dice lo que quiere
escuchar”.
En medio de los feriados de Semana Santa,
Scioli aprovechó la oportunidad para defender sus intenciones presidenciales al
convocar al voto "independiente y de los jóvenes” y renovar críticas a sus
contrincantes.
En ese sentido, dijo: "Van al campo y dicen que
van a sacar todas las retenciones; a otros les dicen que van a levantar el
cepo; y después que van a eliminar Ganancias”, en alusión al jefe de Gobierno
porteño, Mauricio Macri, y al diputado Sergio Massa, quienes expresaron que van
a avanzar en esas medidas si son elegidos.
Scioli también señaló que su espacio va "a
actuar con mucha responsabilidad y seriedad en estos temas” porque, advirtió,
"acá hay que tener una visión integral del equilibrio del Estado”.
Por eso, remarcó que "cuando uno gobierna no
hay mayor satisfacción que aumentar los sueldos, que todos puedan estar mejor,
pero eso hay que hacerlo con una gran responsabilidad y una visión integral”.
El candidato dijo a radio Continental que
apoyará su campaña en la gestión bonaerense, por lo que remarcó que no necesita
"sobreactuar o actuar demagógicamente”.
Y sostuvo que su propuesta busca continuar las
políticas kirchneristas "con evolución en varios temas” y enfatizó que en la
Argentina "hay que evitar que se vuelva al pasado, que sea siempre volver a
empezar”. Agencia DyN